Según publica el diario La Nación, la empresa cervecera Quilmes anunció inversiones en el país por 26 mil millones de pesos.
La firma, que allá por 1890 fundó la familia Bemberg, en la ciudad de Quilmes, hoy es controlada por la multinacional AB InBev.
Hubo un encuentro de directivos de la empresa con el presidente Mauricio Macri y anunciaron que en los próximos años van a hacer inversiones por 26.870 millones de pesos.
Se informó que la mayoría de las inversiones serán para ampliar y modernizar las cervecerías y las plantas de elaboración de gaseosas, distribuidas en once provincias argentinas.
Asimismo se instalará una planta desalcoholizadora, una nueva línea de barriles y se expandirá el negocio agrícola para la siembra de la cebada y el lúpulo (materia prima del producto cervecero).
Otro anuncio de Quilmes es que en el quinquenio 2016/2020 van a lanzar nuevos envases de vidrio retornable como el porrón de 340 cc, la inversión en campañas de comunicación para todo el portfolio de productos y la implementación de nueva infraestructura para la generación de energías renovables.
El presidente de Cervecería, Diego Dávila, comentó a La Nación que la nueva inversión supera con creces a los 6100 millones invertidos entre 2012 y 2015.
El titular de la firma reconoció que el año comenzó mal para las compañías de consumo masivo por medidas tomadas en el primer trimestre, aclarando que el efecto se sintió más en la industria de gaseosas que en la de cervezas. Pero destacó su optimismo en el sentido de que el segundo semestre muestre un cambio.
Del encuentro participó el ministro de Planificación de la Nación, Francisco Cabrera, el asesor en inversión extranjera de Presidencia, Horacio Reyser y el presidente ejecutivo de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, Juan Procaccini.
Por la cervecería también estuvieron Carlos Alberto Sicupira, uno de los mayores accionistas del grupo AB InBev y Pablo Querol, vicepresidente de Asuntos Corporativos y Legales de Quilmes.
El diario La Nación concluye la nota diciendo que Quilmes es controlada por la mutinacional Anheuser-Bush InBev, con sede central en Lovaina, Bélgica y opera en 24 países. Tiene 5745 empleados en la Argentina, once plantas productivas, incluyendo cervecerías, plantas de gaseosas, una maltería y una chacra de lúpulo, nueve oficinas de venta directa y otras tantos centros de distribución. Además, tiene una red de 181 distribuidores independientes.
La firma, que allá por 1890 fundó la familia Bemberg, en la ciudad de Quilmes, hoy es controlada por la multinacional AB InBev.
Hubo un encuentro de directivos de la empresa con el presidente Mauricio Macri y anunciaron que en los próximos años van a hacer inversiones por 26.870 millones de pesos.
Se informó que la mayoría de las inversiones serán para ampliar y modernizar las cervecerías y las plantas de elaboración de gaseosas, distribuidas en once provincias argentinas.
Asimismo se instalará una planta desalcoholizadora, una nueva línea de barriles y se expandirá el negocio agrícola para la siembra de la cebada y el lúpulo (materia prima del producto cervecero).
Otro anuncio de Quilmes es que en el quinquenio 2016/2020 van a lanzar nuevos envases de vidrio retornable como el porrón de 340 cc, la inversión en campañas de comunicación para todo el portfolio de productos y la implementación de nueva infraestructura para la generación de energías renovables.
El presidente de Cervecería, Diego Dávila, comentó a La Nación que la nueva inversión supera con creces a los 6100 millones invertidos entre 2012 y 2015.
El titular de la firma reconoció que el año comenzó mal para las compañías de consumo masivo por medidas tomadas en el primer trimestre, aclarando que el efecto se sintió más en la industria de gaseosas que en la de cervezas. Pero destacó su optimismo en el sentido de que el segundo semestre muestre un cambio.
Del encuentro participó el ministro de Planificación de la Nación, Francisco Cabrera, el asesor en inversión extranjera de Presidencia, Horacio Reyser y el presidente ejecutivo de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, Juan Procaccini.
Por la cervecería también estuvieron Carlos Alberto Sicupira, uno de los mayores accionistas del grupo AB InBev y Pablo Querol, vicepresidente de Asuntos Corporativos y Legales de Quilmes.
El diario La Nación concluye la nota diciendo que Quilmes es controlada por la mutinacional Anheuser-Bush InBev, con sede central en Lovaina, Bélgica y opera en 24 países. Tiene 5745 empleados en la Argentina, once plantas productivas, incluyendo cervecerías, plantas de gaseosas, una maltería y una chacra de lúpulo, nueve oficinas de venta directa y otras tantos centros de distribución. Además, tiene una red de 181 distribuidores independientes.
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