Esta noche el Frente Generacional Cervecero realizó el lanzamiento de la candidatura de Marcelo Calello a la presidencia del Quilmes Atlético Club, representando a la oposición, con cifradas esperanzas de ser titular del Decano del fútbol argentino tras los comicios del 31 de julio. Como el oficialismo da la impresión de que no se presentará -estuvo buscando candidatos y no los encuentra, asimismo fracasó en el intento de seducir a la lista Blanca, con el nombre de Luciano López- hoy puede decirse que será Calello el que tendrá que asumir las riendas de un club en una situación terminal.
Como prueba elocuente de ese dato, vale reproducir el comunicado que el Frente acaba de difundir, dirigido a denunciar la situación que se ha generado en la institución con la actividad de Luis Andreuchi y la descapitalización del patrimonio futbolístico con la decisión de dejar libres a varios futbolistas formados en la institución.
El comunicado está dirigido: "Los integrantes del Frente Generacional Cervecero nos dirigimos a los socios del QAC, a la prensa que cubre las noticias del club y especialmente a los dirigentes que dicen conducir los destinos del club a fin de expresar nuestro total rechazo y profunda preocupación por la ilegal decisión de la directiva, liderada por Andrés Meiszner, de otorgar de manera ilegítima a un privado, Luis Andreuchi, la potestad de administrar y llevar adelante la gestión de todo lo referente al fútbol profesional y juvenil del club. Esta delegación incluye la potestad de definir el presupuesto anual de fútbol, la designación del entrenador y de los jugadores del próximo plantel de primera división y hasta la potestad de dejar en libertad de acción a una serie de profesionales surgidos de nuestra cantera y que constituían uno de los principales activos del club, tales como Alan Alegre, Leonel Bontempo, Lucas Perez Godoy, Matías Morales, Lucas Suárez, Leonel Demelchiori, Francisco Ilarregui, Jonathan Torres y Marcos Ledesma.
Cabe destacar que este gerenciador de hecho no es dirigente ni socio del club sino casualmente un acreedor de la institución. Esta inentendible delegación de facultades demuestra una clara intención de poner al zorro a cuidar el gallinero, toda vez que Luis Andreuchi es uno de los principales acreedores de la institución en desmedro también de la terrible masa de acreedores que alcanza los ya más de 200 millones de pesos.
La decisión ilegítima, arbitraria y desafortunada de la comisión directiva implica una clara violación del artículo 33 del estatuto social, el cual indica que el club debe ser administrado por su comisión directiva y no por un tercero. Esta violación estatutaria hace que resulte aplicable el artículo 39 del estatuto, que dispone que los dirigentes responderán en forma personal y solidaria por incumplimiento de sus deberes y obligaciones y/o mal desempeño de su cometido y/o por violaciones a las disposiciones estatutarias.
Desde este Frente Generacional, con vocación de gobierno transparente y democrático prometemos velar por el cuidado de nuestro patrimonio y la integridad de nuestra institución y estamos decididos a realizar las denuncias penales y llevar a cabo las acciones civiles y administrativas correspondientes contra los integrantes de la comisión directiva que ilegítimamente han delegado una parte fundamental de sus funciones como es velar por el cuidado del patrimonio del club.
Con tristeza y una alta cuota de preocupación todos los socios del QAC estamos siendo víctimas de la etapa final de un proceso de desmantelamiento institucional perpretado durante casi cuarenta años por el señor José Luis Meiszner y ahora, su hijo Andrés.
Por eso desde este Frente plural, compuesto por socios genuinos de la institución, estamos decididos a asumir la conducción del club para evitar que nuestro viejo y querido club literalmente desaparezca.
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