Regresa a la cartelera una de las obras que tuvo las mejores críticas y comentarios del público y nominaciones en los premios más importantes.
Desde el 18 de marzo en Chacarerean teatre, Nicaragua 5565, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se presenta Un judío común y corriente, con la actuación de Gerardo Romano. Obra de Charles Lewinsky, versión en español de Lázaro Droznes.
Dirección de Manuel González Gil.
La obra refleja el conflicto que debe resolver un judío alemán que vive en Alemania cuando recibe la invitación de un profesor en ciencias sociales de una escuela secundaria, cuyos alumnos, luego de estudiar el nazismo quieren conocer a un judío.
Entonces, el protagonista pasa revista a los principales puntos de la argumentación por los que considera que no debe aceptar la invitación y de esa manera ilustra a la audiencia sobre la problemática contemporánea de los judíos fuera de Israel y sobre los problemas específicos que se plantea para un judío la vida en un país cuya población vive bajo el peso sicológico de las consecuencias del nazismo.
No exenta de humor y a la vez poseedora de un gran peso dramático y una carga emotiva acorde al tema, la pieza es el vehículo exacto para que Gerardo Romano vuelva a utilizar el formato de monólogo teatral y bajo la dirección de Manuel González Gil logren capturar el interés del público a lo largo de los 80 minutos de duración del espectáculo.
La música original de Martín Bianchedi y la sintética y a la vez realista escenografía de Marcelo Valiente contribuyen a lograr el clima necesario para que con un sencillo vestuario y una iluminación apropiada la obra vaya directo al corazón de los espectadores.
Se ofrece los viernes y sábados a las 21.
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