¿Cuánto hacía que Quilmes no ganaba y cuánto que no gustaba y goleaba? Hoy se pudo dar el gran gusto el equipo de Alfredo Grelak, que derrotó a San Lorenzo en el Centenario por 3 a 0, con dos goles de Ezequiel Rescaldani, el primero de penal y el restante de Orihuela.
Quilmes sacó pecho ante la adversidad, demostró que los Indios Quilmes saben salir de los atolladeros y con una excelente producción ahondó el preocupante momento del Santo, que fue pura voluntad y pocas ideas. Incluso hay rumores que hablan de dudas en la continuidad del técnico Pablo Guede.
Quilmes abrió la cuenta a los 17, tras una buena jugada del Cervecero que terminó en el brazo de un defensor Santo. Penal sancionó Herrera y Rescaldini definió con jerarquía.
El primer tiempo fue más equilibrado. San Lorenzo quiso pero no pudo llegar al arco de Benítez, lo hizo en forma esporádica.
En el segundo tiempo la superioridad de Quilmes se tradujo en la red, primero fue Orihuela de cabeza quien venció la valla de Torrico tras una corrida de Bottino, de buena actuación, el pase a Chirola Romero y el excelente centro para que el autor del gol superara al 1 Santo.
San Lorenzo quiso descontrar pero se mostró contrariado con su juego, nunca pudo superar la defena quilmeña y para colmo llegó el tercero con Rescaldani de cabeza.
La hinchada Cervecero festejó ruidosamente la victoria, porque el equipo conjugó las tres G del fútbol: Ganó, gustó y goleó.
Más allá de las adversidades que viene sufriendo este plantel -ayer no concentraron por la deuda que tiene el club con los jugadores- a la hora de jugar Quilmes infló el pecho y aprovechó al máximo las ventajas que le dio el rival.
Desde noviembre -cuando le ganó a Huracán 2 a 1 durante la época en que el técnico era Facundo Sava-no ganaba Quilmes en su casa.
En la tribuna se vivió el momento institucional a todo trapo. Los gritos fueron contra la comisión y el consabido "la comisión/la comisión se va a la....", los insultos como siempre tuvieron como destinatario al doctor José Luis Meieszner y en algún momento la popular pidió casi como un ruego "paguen los sueldos...".
Recordemos que el capitán Rodrigo Braña fue quien habló el viernes por el plantel, anunciando que el sábado no concentraban porque les deben cuatro meses: noviembre, diciembre, enero y febrero.
Después de la enorme demostración que dieron los jugadores, advirtiendo a los directivos que ponen todo más allá de que la deuda es muy importante, los directivos tendrán que ponerse las pilas y dar una respuesta al pedido, porque la próxima contienda del Cervecero será el domingo 27 a las 20 en Liniers, cuando visiten a Velez (partido postergado de la séptima fecha).
A la hora de hablar de figuras del local, debe señalarse el gran despliegue en defensa de Bottino, la experiencia interminable del Chapu Braña y de Chirola Romero y la efectividad de Rescaldani en la red, como la habilidad y velocidad del chico Andrada, que fue una pesadilla para la defensa Santa.
Comenzó la Semana Santa y la gloria fue para el Cervecero, que humilló al equipo del Papa y de Marcelo Tinelli, con superioridad y contundencia. Incluso se quebró una constante de este torneo por la que Quilmes bajaba el rendimiento en los segundos tiempos. Esta vez Quilmes fue superior en los dos tiempos y justificó con creces esta victoria, que abre las puertas para la ilusión.
Claro está, lo que habrá que enderezar es el momento institucional, que se vive intensamente en la tribuna popular. Incluso hablando con alguno de los protagonistas de la oposición, muy preocupado por la deuda que tiene la institución (la revista Indios Quilmes, hablando de la asamblea que aprobó la memoria y balance en 22 minutos con un pasivo de 134 millones, dijo con ironía que el QAC tiene más deuda que los años de existencia. Recordemos que fue fundado el 27 de noviembre de 1887, o sea este año cumple 129 años).
Se merecía estos hinchas que van siempre al estadio una alegría como la de hoy. Y jugando con las palabras en Domingo de Ramos, la Gloria fue para el Decano, el técnico Alfredo Grelak pudo por fin disfrutar, dejando el calvario para el Santo, con su técnico criticado.
Y como adelantó el diario El Sol -único medio- el técnico Grelak a último momento prefirió a Orihuela en lugar de Fernando Elizari. Este, con iniciales F.E., quedó en el banco y cuando el calvario del Santo era u imposible de resucitar, apareció F.E. en el campo para terminar celebrando una victoria para gritar durante muchos días, al menos hasta la nueva prueba del domingo en Velez.
Ah, en Semana Santa, habrá que rogar a los dioses del Olimpo Cervecero -léase dirigentes- que se pongan las pilas y comiencen a reducir la deuda con estos jugadores, que hoy jugaron sin concentración, sin sueldos al día ni cosa por el estilo... como para demostrar que Quilmes está vivo, hoy más que nunca.
Quilmes sacó pecho ante la adversidad, demostró que los Indios Quilmes saben salir de los atolladeros y con una excelente producción ahondó el preocupante momento del Santo, que fue pura voluntad y pocas ideas. Incluso hay rumores que hablan de dudas en la continuidad del técnico Pablo Guede.
Quilmes abrió la cuenta a los 17, tras una buena jugada del Cervecero que terminó en el brazo de un defensor Santo. Penal sancionó Herrera y Rescaldini definió con jerarquía.
El primer tiempo fue más equilibrado. San Lorenzo quiso pero no pudo llegar al arco de Benítez, lo hizo en forma esporádica.
En el segundo tiempo la superioridad de Quilmes se tradujo en la red, primero fue Orihuela de cabeza quien venció la valla de Torrico tras una corrida de Bottino, de buena actuación, el pase a Chirola Romero y el excelente centro para que el autor del gol superara al 1 Santo.
San Lorenzo quiso descontrar pero se mostró contrariado con su juego, nunca pudo superar la defena quilmeña y para colmo llegó el tercero con Rescaldani de cabeza.
La hinchada Cervecero festejó ruidosamente la victoria, porque el equipo conjugó las tres G del fútbol: Ganó, gustó y goleó.
Más allá de las adversidades que viene sufriendo este plantel -ayer no concentraron por la deuda que tiene el club con los jugadores- a la hora de jugar Quilmes infló el pecho y aprovechó al máximo las ventajas que le dio el rival.
Desde noviembre -cuando le ganó a Huracán 2 a 1 durante la época en que el técnico era Facundo Sava-no ganaba Quilmes en su casa.
En la tribuna se vivió el momento institucional a todo trapo. Los gritos fueron contra la comisión y el consabido "la comisión/la comisión se va a la....", los insultos como siempre tuvieron como destinatario al doctor José Luis Meieszner y en algún momento la popular pidió casi como un ruego "paguen los sueldos...".
Recordemos que el capitán Rodrigo Braña fue quien habló el viernes por el plantel, anunciando que el sábado no concentraban porque les deben cuatro meses: noviembre, diciembre, enero y febrero.
Después de la enorme demostración que dieron los jugadores, advirtiendo a los directivos que ponen todo más allá de que la deuda es muy importante, los directivos tendrán que ponerse las pilas y dar una respuesta al pedido, porque la próxima contienda del Cervecero será el domingo 27 a las 20 en Liniers, cuando visiten a Velez (partido postergado de la séptima fecha).
A la hora de hablar de figuras del local, debe señalarse el gran despliegue en defensa de Bottino, la experiencia interminable del Chapu Braña y de Chirola Romero y la efectividad de Rescaldani en la red, como la habilidad y velocidad del chico Andrada, que fue una pesadilla para la defensa Santa.
Comenzó la Semana Santa y la gloria fue para el Cervecero, que humilló al equipo del Papa y de Marcelo Tinelli, con superioridad y contundencia. Incluso se quebró una constante de este torneo por la que Quilmes bajaba el rendimiento en los segundos tiempos. Esta vez Quilmes fue superior en los dos tiempos y justificó con creces esta victoria, que abre las puertas para la ilusión.
Claro está, lo que habrá que enderezar es el momento institucional, que se vive intensamente en la tribuna popular. Incluso hablando con alguno de los protagonistas de la oposición, muy preocupado por la deuda que tiene la institución (la revista Indios Quilmes, hablando de la asamblea que aprobó la memoria y balance en 22 minutos con un pasivo de 134 millones, dijo con ironía que el QAC tiene más deuda que los años de existencia. Recordemos que fue fundado el 27 de noviembre de 1887, o sea este año cumple 129 años).
Se merecía estos hinchas que van siempre al estadio una alegría como la de hoy. Y jugando con las palabras en Domingo de Ramos, la Gloria fue para el Decano, el técnico Alfredo Grelak pudo por fin disfrutar, dejando el calvario para el Santo, con su técnico criticado.
Y como adelantó el diario El Sol -único medio- el técnico Grelak a último momento prefirió a Orihuela en lugar de Fernando Elizari. Este, con iniciales F.E., quedó en el banco y cuando el calvario del Santo era u imposible de resucitar, apareció F.E. en el campo para terminar celebrando una victoria para gritar durante muchos días, al menos hasta la nueva prueba del domingo en Velez.
Ah, en Semana Santa, habrá que rogar a los dioses del Olimpo Cervecero -léase dirigentes- que se pongan las pilas y comiencen a reducir la deuda con estos jugadores, que hoy jugaron sin concentración, sin sueldos al día ni cosa por el estilo... como para demostrar que Quilmes está vivo, hoy más que nunca.
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