OBAMA

El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, estuvo en la Usina del Arte, en la Boca, ante jóvenes emprendedores. Respondió preguntas y dio una clase acabada de líder democrático.
Quizás la pregunta más emotiva y conmovedora la hizo una  joven argentina de 16 años -Amparo Nieto, cordobesa-, quien refirió que el año pasado había estado en Missouri, Kansas a través de un intercambio. Ella mencionó las diferencias culturales que había notado entre los jóvenes norteamericanos y los argentinos, desde una escuela pública.
Comenzó refiriendo la anécdotas de la sorpresa por el tema de los inodoros (baños automáticos) y la última tecnología, para luego señalar que una de las diferencias advertida fue haberse dado cuenta que los chicos norteamericanos no sabían dónde estaba Argentina y otros datos sobre nuestro país. Y dijo que ellos pensaban que los argentinos no conocíamos la Coca Cola o el teléfono. Y remató Amparo: "¿Por qué es tan difícil para las naciones trabajar juntas y por qué es tan difícil para los líderes políticos llevarse bien?¿Por qué no puedo ser presidente para cambiarlo?".
Sonrió Obama y reconoció que ese es un déficit de su país y que desde su gobierno advertían a los jóvenes la necesidad de la globalización y el conocimiento de otros países u otros idiomas, para poder desenvolverse en esos países.
Más adelante habló de las restricciones que sufren los líderes y los problemas que tienen para plasmar sus politicas. Y volvió a hablar del conflicto entre Israel y Palestina, reconociendo que pese a los esfuerzos realizado no se había avanzado, al contrario se retrocedió. Expuso que a su entender debe buscar una solución saludable para los dos países, y advirtió que con el tiempo crecían los palestinos frente a los judíos, lo que obligaba a aceptar la soberanía de ambos dentro de un clima de tolerancia. Habló de intereses creados y dijo que "a veces esos intereses restringen la posibilidad de lo que pueda hacer un líder aunque esa persona lo quiera hacer. Les mencioné por ejemplo el conflicto Israel- Palestina. Si un líder palestino, como Abu Masi o el presidente Abbas, quieren llegar a una paz con los israelitas tiene que convencer a los palestinos que deberían abandonar ciertos reclamos que tienen, cuando se hace una negociación. Pero si hace ese compromiso puede ser que haya un político palestino joven que dice "ah, eso es una debilidad, Abas nos está regalando, no protege los intereses de los palestinos, él está siendo manipulado o engañado por los israelitas.
"Y si quiere paz, él tiene que hacer concesiones para crear un estado palestino. Pero primero lo tienen que elegir y después dice: si yo hago está concesión y alguien de mi partido me desafía...".
"Lo que sucede es que los políticos en términos generales están siempre tomando decisiones basándose en las ideas y los comentarios que les llegan de la gente que trabaja con ellos o los electores. Y los electores quieren lo que quieren, no quieren un compromiso a veces. No quieren entender los diferentes matices de una relación, y entonces, termina sucediendo en la política que a veces alguien sienta temor de otro o que crear un enemigo es mucho más exitoso para generar pasiones y reacciones que tratar de decir: mire, sentémonos y tratemos de arreglar esto y de entendernos.
"Hay líderes que a veces se concentran mejor en el bien común y otros, que se concentran solamente en decir: cómo me mantengo yo en el poder. Y por último si tienes suerte de vivir en una democracia, y hay que asegurarse que sus líderes actúen bien, y ustedes, los ciudadanos, los electores, tienen que estar también bien informados y estar listos a darle a esa persona -él o ella- el espacio de movimiento que tal vez ahora no sea una decisión correcta, pero a futuro, sí.
Es algo que Argentina y Estados Unidos comparten: el tema de la democracia. Siempre les digo a los estadounidenses que la posición más importante en la democracia no es la presidencia, lo más importante es el ciudadano. Porque si ustedes tienen ciudadanos informados, y conocen de otros países, saben que si ustedes ayudan a alguien de Africa terminarán beneficiándonos a nosotros y si hay una ciudadanía que reconoce que aunque yo tenga que pagar un poquito más de impuestos -a nadie le gusta pagar impuestos-   puede ser que le pueda dar a ese pobre una oportunidad de tener una mejor vida, es decir, como tiene trabajo y una mejor vida, puede pagar impuestos, entonces todos tienen más y la sociedad se beneficia.
O sea, si no hay ciudadanos así van a terminar teniendo líderes que miran las cosas bajo una sola óptica. Entonces, lo que siempre le digo a los jóvenes es que no piensen que ustedes eligen a alguien y ya está porque ellos van a solucionar los problemas, -o sea, ustedes se sientan y se quejan-, cuando eso no sucede. Ustedes tienen que trabajar como ciudadanos también para  dar a los líderes la dirección y el espacio para que hagan lo que tienen que hacer. Es tan importante que ustedes desafíen el tema de la ignorancia o la discriminación o cuestionen a las personas que piensan solamente en la guerra. Ustedes tienen que hacer su trabajo y el presidente, el suyo. ¿Por qué? Porque no importa cuan bueno sea el líder que ustedes eligen, ya que si el pueblo quiere algo diferente en una democracia al menos eso es lo que sucede. La buena noticia es que todos ustedes están listos para afrontar ese desafío y espero que los ciudadanios de los Estados Unidos y de Argentina sigan creando un mejor mundo juntos".
Los aplausos rubricaron las palabras del presidente norteamericano.
Anteriormente habló de distintos temas, frente a las preguntas de los jóvenes argentinos. Se refirió a las elecciones en su país, al conflicto israelí-palestino, los emprendimientos sociales, la lucha contra la pobreza, etcétera.

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