Quilmes ya trabaja en Mar del Plata -hoy el primer turno fue muy temprano en La Feliz- y lo hace con un elenco lleno de pibes. Porque a la experiencia de Chirola Romero, Silvio Dulcich y Mariano Uglessich, más el uruguayo Damián Malrechauffe y Adrián Calello, se suman varios jugadores formados en inferiores.
Ayer se sumaron dos arqueros con edad de cuarta, Alegre y Mulet -el hijo del inolvidable Alejandro, que según dicen todos tiene un parecido increíble con aquel arquero de los 80 y 90 del Cervecero- porque Walter Benítez viajó a Francia para arreglar su incorporación al Niza a partir de junio. Volverá en los próximos días, por lo que hoy por hoy el arquero titular parece ser Dulcich, quien jugó muy poco en estos años que lleva en el Decano, a quien se suman Ledesma, un juvenil, y otros dos chicos, los citados Alegre y Mulet.
Además hay futbolistas formados en el club, todos sub 25, como Alan Alegre, Leonel Bontempo, Lucas Suárez, Matías Morales, Lucas Pérez Godoy, Sergio Hipperdinger, Jonathan Torres, Demelchiori... y el recién llegado Enzo Acosta, un chico con una historia increíble, de quien se tienen cifradas esperanzas.
Los que se incorporaron son todos llegados del ascenso, como Imperiale, Bottino, Celaya, Arce...
El pibe Ilarregui se lesionó y no viajó a Mar del Plata.
A ellos hay que agregar a otro joven, como Nicolás Paterno.
A Quilmes le faltan delanteros, léase goles, y por ahora el técnico Alfredo Grelak trabaja intensamente con los chicos para demostrar que también se puede con ellos, aunque algunos hablen de nubarrones en el cielo cervecero, recordando la pobre experiencia que dejó Pablo Quattrocchi con una situación parecida.
Claro está, hay muchos problemas económicos que determinan que no se puedan hacer incorporaciones de nombre. Eso no quita que se sigan realizando negociaciones, apuntando a figuras como Ezequiel Rescaldani, del Málaga.
Por ahora, es la hora de los pibes... aunque algunos de ellos tienen una importante cantidad de partidos en primera división, lo que de por sí es una base importante.
Ayer se sumaron dos arqueros con edad de cuarta, Alegre y Mulet -el hijo del inolvidable Alejandro, que según dicen todos tiene un parecido increíble con aquel arquero de los 80 y 90 del Cervecero- porque Walter Benítez viajó a Francia para arreglar su incorporación al Niza a partir de junio. Volverá en los próximos días, por lo que hoy por hoy el arquero titular parece ser Dulcich, quien jugó muy poco en estos años que lleva en el Decano, a quien se suman Ledesma, un juvenil, y otros dos chicos, los citados Alegre y Mulet.
Además hay futbolistas formados en el club, todos sub 25, como Alan Alegre, Leonel Bontempo, Lucas Suárez, Matías Morales, Lucas Pérez Godoy, Sergio Hipperdinger, Jonathan Torres, Demelchiori... y el recién llegado Enzo Acosta, un chico con una historia increíble, de quien se tienen cifradas esperanzas.
Los que se incorporaron son todos llegados del ascenso, como Imperiale, Bottino, Celaya, Arce...
El pibe Ilarregui se lesionó y no viajó a Mar del Plata.
A ellos hay que agregar a otro joven, como Nicolás Paterno.
A Quilmes le faltan delanteros, léase goles, y por ahora el técnico Alfredo Grelak trabaja intensamente con los chicos para demostrar que también se puede con ellos, aunque algunos hablen de nubarrones en el cielo cervecero, recordando la pobre experiencia que dejó Pablo Quattrocchi con una situación parecida.
Claro está, hay muchos problemas económicos que determinan que no se puedan hacer incorporaciones de nombre. Eso no quita que se sigan realizando negociaciones, apuntando a figuras como Ezequiel Rescaldani, del Málaga.
Por ahora, es la hora de los pibes... aunque algunos de ellos tienen una importante cantidad de partidos en primera división, lo que de por sí es una base importante.
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