CAMPAÑAS

El kirchnerismo parece estar dispuesto a apelar a cualquier recurso con el objetivo de imponer a su candidato, Daniel Scioli, en el balotaje del 22 de noviembre.
Así se mostró una campaña sucia desde la pantalla de Fútbol para todos. En el intervalo del partido Boca-Tigre, que ameritaba una enorme audiencia, se mostró un presunto paralelo entre la política económica que implantaría el candidato Mauricio Macri y la que impuso el gobierno de facto, con el ministro de economía Martínez de Hoz.
Burda maniobra de quien se siente inferior, pese a haber ganado las elecciones generales por 2,5 puntos.
A eso se suma el rumor de que la flamante gobernadora María Eugenia Vidal anularía el plan Envión en la provincia de Buenos Aires, algo que fue negado por la afectada, tanto en el almuerzo de la víspera con Mirtha Legrand como en el programa La Cornisa, de Luis Majul.
Se estima que la inflación de spot atacando a Macri se irán multiplicando en los días que restan hasta el domingo 22.
Por cierto, los que gestan esta arremetida parecen no haber digerido los resultados del pasado 25 de octubre.
Incluso desde el kirchnerismo se quejan y ponen el grito en el cielo por lo que entienden será una hiperconcentración de poder por el frente Cambiemos, con el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, el de la provincia y en su caso, el de la Nación.
¿El kirchnerismo duro, alentado por Cristina, quejándose de la concentración de poder? Parece una broma de Tinelli...

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