Ya estamos en los umbrales de las P.A.S.O., las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias, elecciones que serán en todo el país el próximo domingo 9 de agosto.
En la oportunidad habrá que elegir las autoridades que van a dirimir el domingo 25 de octubre el gran comicio general, que puede tener resolución ese mismo día o dar lugar al ballotaje en noviembre.
Los principales candidatos a presidente son Mauricio Macri, por el PRO, Sergio Massa por el Frente Renovador y Daniel Scioli por el Frente para la Victoria, pero también habrá que tener en cuenta las posibilidades de Margarita Stolbizer, Ernesto Sanz, Lilita Carrió, además de los demás partidos, debiéndose recordar que para poder participar en las elecciones generales hay que superar un límite del 1,5 por ciento.
Seguramente en la semana que se inicia mañana estallará la propaganda de los distintos postulantes para tratar de seducir al electorado.
El viernes será el último día y luego vendrá la veda electoral, pensando en el gran acto del 9 de agosto, entre las 8 y las 18.
Habrá que esperar que impere el rigor cívico y que toda la ciudadanía concurra a votar con alegría, pensando en el futuro de la Nación.
La provincia de Buenos Aires, sin duda, se convierte en una de las principales batallas electorales, por el importante aporte de ciudadanos en condiciones de votar. No hay que olvidar que se trata del 40 por ciento del electorado nacional.
No habrá voto electrónico, se mantiene el recurso obsoleta de las boletas sábana, que no sólo aparecen con una extensión de 80 centímetros -1,20 en La Rioja- sino que muestran una enorme cantidad de combinaciones que pueden llegar a complicar al votante, y por supuesto, obligarán a una actuación rigurosa de fiscales y seguramente van a estirar el tiempo de conteo de los votos, por lo que los primeros resultados recién se podrán conocer sobre las 22.
Vale anhelar que sea una fiesta cívica y que no hay que lamentar ningún hecho desagradable, máxime teniendo en cuenta algunas denuncias de eventuales fraudes, si no hay controles. Esperemos que esto no ocurra y que la democracia siga afirmando su vigencia, tras más de tres de décadas de existencia.
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