En el Centenario, Quilmes y Temperley empataron sin goles, en un partido pobre, donde prevaleció la estrategia sobre el juego.
El Celeste planteó el encuentro, esperando a Quilmes y buscando ocupar los espacios para que el Cervecero no pudiera llegar a Crivelli.
Ese esquema se extremó en el complemento, apostando siempre el visitante a los errores defensivos de Quilmes.
Pudo haber ganado Temperley, si hubiese aprovechado algunos "regalos" de la defensa quilmeña, bastante incómoda con la perseverancia rival por trabajar el partido.
Cuando el Chapu Braña se fue expulsado por segunda amarilla, Quilmes quedó prácticamente resignado a jugarse por punto, porque la voluntad de ir tropezaba con la falta de ideas, y de contra, proponiéndose poco, algo molestó al local.
Fue empate, justo si se quiere por lo que expusieron ambos. Temperley se quedó con un nuevo empate en cero, consolidando la opinión de ser un equipo difícil de vulnerar -su defensa es una de las menos vencidas- y Quilmes no pudo ni supo mantener el nivel que lo llevaron a sumar cuatro victorias seguidas en el torneo.
De todas formas el punto sirve, de cara al futuro. Lo importante es sumar, evaluar errores y ya pensar en lo que viene, que será el jueves a las 19 en Lanús ante Estudiantes de La Plata, por la Copa Argentina, con el arbitraje de Fernando Espinosa (el ganador de este encuentro se medirá con Rosario Central).
El 7 de setiembre el Cervecero visitará a Rafaela, en un encuentro complicado por lo que cuesta siempre a Quilmes ese escenario. Habrá que ver qué pasa con la fecha 23 porque algunos clubes van a intentar ponerla en tela de juicio en AFA, teniendo en cuenta que la selección nacional jugará amistosos y algunos equipos aportan futbolistas al equipo del Tata Martino.
Vale recordar que Quilmes no podrá contar con Braña ante Rafaela, aunque sí lo tendrá frente a Estudiantes, por tratarse de otro torneo.
El Celeste planteó el encuentro, esperando a Quilmes y buscando ocupar los espacios para que el Cervecero no pudiera llegar a Crivelli.
Ese esquema se extremó en el complemento, apostando siempre el visitante a los errores defensivos de Quilmes.
Pudo haber ganado Temperley, si hubiese aprovechado algunos "regalos" de la defensa quilmeña, bastante incómoda con la perseverancia rival por trabajar el partido.
Cuando el Chapu Braña se fue expulsado por segunda amarilla, Quilmes quedó prácticamente resignado a jugarse por punto, porque la voluntad de ir tropezaba con la falta de ideas, y de contra, proponiéndose poco, algo molestó al local.
Fue empate, justo si se quiere por lo que expusieron ambos. Temperley se quedó con un nuevo empate en cero, consolidando la opinión de ser un equipo difícil de vulnerar -su defensa es una de las menos vencidas- y Quilmes no pudo ni supo mantener el nivel que lo llevaron a sumar cuatro victorias seguidas en el torneo.
De todas formas el punto sirve, de cara al futuro. Lo importante es sumar, evaluar errores y ya pensar en lo que viene, que será el jueves a las 19 en Lanús ante Estudiantes de La Plata, por la Copa Argentina, con el arbitraje de Fernando Espinosa (el ganador de este encuentro se medirá con Rosario Central).
El 7 de setiembre el Cervecero visitará a Rafaela, en un encuentro complicado por lo que cuesta siempre a Quilmes ese escenario. Habrá que ver qué pasa con la fecha 23 porque algunos clubes van a intentar ponerla en tela de juicio en AFA, teniendo en cuenta que la selección nacional jugará amistosos y algunos equipos aportan futbolistas al equipo del Tata Martino.
Vale recordar que Quilmes no podrá contar con Braña ante Rafaela, aunque sí lo tendrá frente a Estudiantes, por tratarse de otro torneo.
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