Sábado 18 de julio a las 16.10 en la Bombonera: juegan Boca y Quilmes por la fecha 17 del torneo de primera división del fútbol argentino.
Dos equipos de campañas muy diferentes y con motivaciones distintas. El Cervecero viene de capa caída, porque tras el receso por la Copa América no conformó ante Bánfield y perdió 1 a 0.
Boca, en cambio, volvió con todo de la pretemporada y ganó en Junín a Sarmiento, también 1 a 0, lo que le permitió alcanzar la punta en soledad.
Además, para que la fiesta sea completa, el Boquense anuncia el retorno del hijo pródigo, Carlos Tevez, quien regresa al país después de muchos años en el exterior y vuelve al club que lo catapultó a la fama en el fútbol.
Así las cosas, Julio César Falcioni, técnico de Quilmes, cuestionado por hinchas y simpatizantes, además del periodismo que sigue la campaña del decano del fútbol argentino, vuelve a la Bombonera para enfrentar al club al que lo llevó al título mayor.
Entonces, Quilmes apuesta al milagro, porque las condiciones están dadas -más allá de que Dante Panzeri proclamaba que el fútbol era la dinámica de lo impensado- para que el local se floree, gane, guste y por qué no, golee, como para comenzar a hacer tambalear la continuidad del técnico Falcioni.
El partido se juega el sábado porque al día siguiente hay elecciones en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con el balotaje, entre Horacio Rodríguez Larreta, quien lleva la delantera y Martín Lousteau.
¿Podrá Quilmes producir el milagro? No hay que olvidar que ese escenario le ha sido tradicionalmente adverso, ya que sólo ganó una vez, 1 a 0, con gol de Rando de tiro libre.
Dos equipos de campañas muy diferentes y con motivaciones distintas. El Cervecero viene de capa caída, porque tras el receso por la Copa América no conformó ante Bánfield y perdió 1 a 0.
Boca, en cambio, volvió con todo de la pretemporada y ganó en Junín a Sarmiento, también 1 a 0, lo que le permitió alcanzar la punta en soledad.
Además, para que la fiesta sea completa, el Boquense anuncia el retorno del hijo pródigo, Carlos Tevez, quien regresa al país después de muchos años en el exterior y vuelve al club que lo catapultó a la fama en el fútbol.
Así las cosas, Julio César Falcioni, técnico de Quilmes, cuestionado por hinchas y simpatizantes, además del periodismo que sigue la campaña del decano del fútbol argentino, vuelve a la Bombonera para enfrentar al club al que lo llevó al título mayor.
Entonces, Quilmes apuesta al milagro, porque las condiciones están dadas -más allá de que Dante Panzeri proclamaba que el fútbol era la dinámica de lo impensado- para que el local se floree, gane, guste y por qué no, golee, como para comenzar a hacer tambalear la continuidad del técnico Falcioni.
El partido se juega el sábado porque al día siguiente hay elecciones en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con el balotaje, entre Horacio Rodríguez Larreta, quien lleva la delantera y Martín Lousteau.
¿Podrá Quilmes producir el milagro? No hay que olvidar que ese escenario le ha sido tradicionalmente adverso, ya que sólo ganó una vez, 1 a 0, con gol de Rando de tiro libre.
Comentarios