MASSA

En Vélez Sársfield, ante una multitud -el orador habló de 60 mil personas- el precandidato a presidente del Frente Renovador, Sergio Massa, lanzó su campaña para las PASO de agosto.
Massa estaba acompañado por su esposa, Malena, sus hijos, padres, militantes, intendentes, legisladores, etcétera, que vivaron al candidato en su corta pero emotiva alocución.
Dijo a la concurrencia que les iba a trasmitir un secreto: voy a ser presidente de los argentinos. Ese sueño, a los 42 años, lo convertiría en el primer magistrado más joven de la historia nacional.
Habló de distintas medidas que pensaba tomar, si era elegido, entre otros la sanción de la Asignación Universal por Hijo por ley, modificado su monto cada seis meses, sostuvo que iba a perseguir a los corruptos y que iba a echar a los ñoquis de la Cámpora, anunció que eliminaría el impuesto a las ganancias para los trabajadores, habló de la justicia, del Congreso, de los jubilados, de la libertad, de la necesidad de unión y convocó a todos los argentinos a sumarse a su cruzada.
Fue muy aplaudido en los veinte minutos que duró el discurso, en un clima de banderas argentinas y gentes llegadas de distintas partes del país, muchos de Córdoba, provincia cuyo gobernador, De la Sota, acompañará a Massa en los comicios.
El periodista Nelson Castro, tras el acto, comentó que lo más importante había sido lo que dijo Massa al final, cuando les habló a todos a sumarse a la convocatoria. Dijo Castro que el candidato había hablado a los propios y a los otros, concretamente los de Macri, porque a su entender si no se logra ese ensamble el kirchnerismo terminará ganando nuevamente las elecciones.

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