Gerardo Romano actúa estanoche en el Maipo Kabaret, con la obra Un judío común y corriente, de Charles Lewinsky, versión en español de Lázaro Droznes.
Se trata de un estreno mundial en la Argentina.
La pieza se estrena hoy a las 21 y se dará de miércoles a viernes a las 20, los sábados a las 21 y los domingos a las 19.30.
Refleja el conflicto que debe resolver un judío alemán que vive en Alemania cuando recibe la invitación de un profesor de ciencias sociales de una escuela secundaria, cuyos alumnos, luego de estudiar el nazismo, quieren conocer a un judío.
Entonces, el protagonista pasa revista a los principales puntos de argumentación por los que considera que no debe aceptar la invitación y así ilustra a la audiencia sobre la problemática contemporánea de los judíos fuera de Israel y sobre los problemas específicos que plantea para un judío la vida en un país cuya población vive bajo el peso sicológico de las consecuencias del nazismo.
No exenta de humor y a la vez poseedora de un gran peso dramático y una carga emotiva acorde al tema, Un judío común y corriente es un vehículo exacto para que Gerardo Romano vuelva a utilizar el formato del monólogo teatral y bajo la dirección de Manuel González Gil logren capturar el interés del público a lo largo de 80 minutos, como dura el espectáculo.
La música original es de Martín Bianchedi y la sintética y a la vez realista escenografía de Marcelo Valiente, apropiada para el íntimo reducto que ofrece Maipo Kabartet, contribuyen a lograr el clima necesario para que con un sencillo vestuario y sin otro aditamento que el de una apropiada iluminación, la pieza vaya diercto al corazón de los espectadores.
La cita en Esmeralda 443, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
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