Ha muerto el fiscal del juicio a las Juntas, el doctor Julio César Strassera, todo un ejemplo de profesionalismo y patriotismo.
Fue el fiscal del juicio a las Juntas Militares que produjeron la más terrible dictadura militar que existió en la Argentina, entre 1976 y 1983.
Su labor intensa, con un gran equipo de colaboradores, determinó el juicio a los represores y aquel histórico NUNCA MAS con que la Conadep (Comisión Nacional sobre desaparición de personas), dos palabras que significaron un hito histórico, sintetizando el espíritu de aquella tarea judicial, para que nunca más el país viva el flagelo de una dictadura.
Pasaron tres décadas de aquel juicio y la muerte del fiscal Strassera -tenía 81 años- condensa un momento de poner un alto en el camino para repasar estas tres décadas de democracia.
Justamente, cuando se está por cumplir el último tramo del kirchnerismo en el poder -mañana será el discurso de la presidente frente a los legisladores, en la apertura del período de sesiones del Parlamento- el ejemplo del fiscal Strassera debe ser una luz de guía para todos los argentinos, y fundamentalmente para los que ejercen el poder, para que entiendan que simplemente son delegados de la voluntad popular.
Nunca el poder es para siempre, tiene fecha de vencimiento y será el 10 de diciembre cuando CFK entregue la banda a un nuevo presidente.
Fue el fiscal del juicio a las Juntas Militares que produjeron la más terrible dictadura militar que existió en la Argentina, entre 1976 y 1983.
Su labor intensa, con un gran equipo de colaboradores, determinó el juicio a los represores y aquel histórico NUNCA MAS con que la Conadep (Comisión Nacional sobre desaparición de personas), dos palabras que significaron un hito histórico, sintetizando el espíritu de aquella tarea judicial, para que nunca más el país viva el flagelo de una dictadura.
Pasaron tres décadas de aquel juicio y la muerte del fiscal Strassera -tenía 81 años- condensa un momento de poner un alto en el camino para repasar estas tres décadas de democracia.
Justamente, cuando se está por cumplir el último tramo del kirchnerismo en el poder -mañana será el discurso de la presidente frente a los legisladores, en la apertura del período de sesiones del Parlamento- el ejemplo del fiscal Strassera debe ser una luz de guía para todos los argentinos, y fundamentalmente para los que ejercen el poder, para que entiendan que simplemente son delegados de la voluntad popular.
Nunca el poder es para siempre, tiene fecha de vencimiento y será el 10 de diciembre cuando CFK entregue la banda a un nuevo presidente.
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