DECANO

Después del importante empate de ayer en el Monumental, Quilmes comenzará mañana la preparación para recibir el sábado, seguramente a última hora, a Independiente.
El Cervecero tiene algunas dudas, por golpes que tienen Calello y Zacaría, de todas maneras se espera que puedan recuperarse para ese importante encuentro.
El equipo de Julio César Falcioni se está armando, y el hecho de sumar, vale para tranquilizar las aguas, trabajar con tranquilidad y encarar el futuro con optimismo.
Se sabe que con la cantidad de futbolistas que llegaron, el trabajo del técnico necesita tiempo y paciencia.
Para colmo el fixture no favoreció al Decano, porque en estas tres primeras fechas los rivales vienen de buenas actuaciones en los últimos tiempos.
La derrota con Lanús en el Centenario generó algunas dudas, incluso algunos impacientes comenzaron a preocuparse. El empate con River de visitante cambió el panorama, y ahora se piensa que es tiempo de sumar de a tres, claro está algo nada fácil porque Independiente siempre es un rival de fuste, y si bien empató en forma angustiosa en su reducto con el ascendido Sarmiento de Junín, venía de ganar nada menos que en Rosario ante Newell`s.
En un torneo de 30 fechas, la paciencia debe ser la principal virtud que debe tener este trabajo de Falcioni y compañía.

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