¿Alguna vez en la Argentina se llegará a la verdad? Después de la muerte del fiscal Alberto Nisman, quien investigaba el atentado a la AMIA y se aprestaba a presentar pruebas de una conexión entre el gobierno nacional e Irán -en su denuncia apuntó a la presidenta, al canciller, al diputado nacional Larroque y al dirigente piquetero Luis D`Elía- la conmoción copó a los argentinos que nos enteramos de la aparición del cuerpo sin vida del fiscal en su departamento de Puerto Madero.
Todo hace suponer que fue un suicidio, de todas maneras se está investigando para saber la verdad, si fue un suicidio, un suicidio inducido o bien un asesinato.
La canción de la verdad, de Nito Mestre, que es la cortina musical del programa de los vecinos Micrófono abierto, por Radio Quilmes (106.5) -seguramente volverá a la sintonía desde marzo- resume en su letra la gran aspiración de este caso como de tantos otros que conmovieron al país en los últimos tiempos.
El caso AMIA ya lleva más de dos décadas, y todavía no se conoce quiénes fueron los autores del terrible atentado.
Ahora que parecía surgir una nueva posibilidad de conocimiento -al menos en cuanto al cambio de rumbo que el gobierno argentino le dio al caso, intentando borrar la pista iraní- como es el anuncio del fiscal Nisman de tener suficientes pruebas para justificar el cambio, con el precedente de la responsabilidad de las máximas autoridades argentinas, se produce este desenlace inesperado como es el final del fiscal.
Justo en las vísperas del importante informe que iba a dar ayer a la tarde en el Parlamento Nacional.
Los diputados de la Comisión de Legislación Penal, encabezados por Patricia Bullrich, esperaban ansiosos ese informe, ahora frustrado.
Se busca la verdad de lo ocurrido. Saber por qué Nisman ha muerto. Si se suicidió, ¿por qué tomó esa decisión? Y si fue inducido, ¿por qué lo llevaron a ese final? Por supuesto, si fue un asesinato, se trata de saber quiénes cometieron el crimen.
Se está investigando, como siempre, y se espera que de una vez por todas se llegue a la verdad, al menos una vez, ya que todos los antecedentes son negativos en cuanto a ese desenlace.
Desde el gobierno suponen que fue un suicidio y quieren que el caso termine lo más rápido posible, para salir airosos frente a una denuncia que rozaba a la máxima autoridad del país.
Precisamente, la presidenta, que tan afecta ha sido a las cadenas nacionales e incluso amenazó alguna vez con llenar de cadenas los horarios centrales de la televisión para ocuparse de casos importantes, en esta oportunidad estuvo callada muchas horas. Y cuando dijo algo lo hizo de soslayo, por la vía de los mail.
Con una extensa carta, habla de conspiración, menciona las culpas de otros y con espíritu autorreferencial quiere hacer creer al pueblo argentino que este gobierno fue el que más hizo por averiguar la causa AMIA.
Curiosas vueltas del destino. Porque Nisman llegó a su cargo puesto por el entonces presidente Kirchner. Fue Néstor el que llamó a Nisman, junto al hombre de Inteligencia, Stiusso, y le dijo a este último: ayuda al pibe (por Nisman) en todo lo que necesite.
Nisman llevaba diez años de investigaciones, y dos años últimos en que la investigación tomó otro color porque siguió la sorpresa del gobierno argentino queriendo justificar una alianza con Irán, justamente el país al que se acusó desde el principio como el que generó el atentado.
Desde ese momento el fiscal investigó profundamente, juntó documentos, escuchas, etcétera, y estaba dispuesto a volcar toda esa información ayer en el Congreso, con la gravedad institucional de involucrar a la presidenta, al canciller...
Ahora el fiscal está muerto. Mucha gente siente esa muerte como un golpe a la justicia y a las instituciones, por eso salieron anoche a manifestarse en distintos lugares del país.
Enero, un mes que generalmente es tranquilo, hoy cambió la situación con una conmoción evidente. Y no es como alguien del gobierno supuso o quiso hacer creer, de que esta información se resalta para tapar el boom turístico de Mar del Plata.
Ha muerto un fiscal de la Nación en situación dudosa. La Nación requiere respuestas, para bien de la salud de la patria.
PD: La canción de Nito Mestre dice entre otras cosas: me quieren vender niebla por claridad.... y yo quiero saber dónde diablos está la verdad...
PD: La canción de Nito Mestre dice entre otras cosas: me quieren vender niebla por claridad.... y yo quiero saber dónde diablos está la verdad...
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