Según aprobó ayer la Cámara de Diputados de la Nación por unanimidad se va a expropiar el edificio de la histórica Confitería del Molino, en Rivadavia y Callao, a metros del palacio legislativo.
Se espera recuperar la tradicional confitería, que cerró sus puertas en 1997 por razones financieras y económicas, así como establecer en el lugar, de cinco pisos, un centro cultural.
El propósito de recuperar la confitería tiene larga data, incluso alguna vez se aprobó en Diputados la iniciativa del entonces legislador del Frente para la Victoria, Coscia, de instalar en el lugar un museo.
No hay que olvidar que la Confitería del Molino, creada en los primeros años del siglo XX, se transformó en un lugar de encuentro para políticos, escritores, hombres de la cultura, con las inolvidables tertulias. Por allí pasaron políticos y legisladores que dejaron su impronta en el país, para muestra basta mencionar al doctor Alfredo L. Palacios, del partido socialista argentino, el primer diputado socialista de América por la circunscripción de la Boca.
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