Argentina, con indudable sufrimiento, le ganó a Suiza 1 a 0 con gol de "Fideo" Di María a un minuto del cierre del tiempo suplementario.
Los 90 minutos fueron parejos, con momentos de cada uno, sin supremacías. La defensa argentina volvió a mostrar falencias, destacándose el arquero Romero cuando tuvo que responder.
Marcos Rojo, sin duda uno de los jugadores más importantes de este ciclo mundial, recibió tarjeta amarilla y no podrá jugar en la próxima ronda.
Los 30 minutos suplementarios fueron parecidos a lo que había pasado anteriormente. El seleccionado albiceleste realizó tres cambios: Basanta por el lesionado Rojo, Biglia por Gago y Palacio por Lavezzi.
Cuando parecía que todo terminaba en el drama de los penales, se iluminó la lámpara de Lionel Messi, quien tras recibir de Palacio, superó a dos rivales a puro talento y cedió a Di María, quien doblegó al buen arquero suizo.
Suiza no se conformó y fue a buscar el empate. Lo tuvo pero el poste primero y el rebote posterior terminaron con el balón afuera, cuando parecía que era gol.
Con suspenso y altibajos -¿estos muchachos serán apodados los caballeros de la angustia?- la Argentina pasó a cuartos de final y ahora espera por el próximo rival, que será Bélgica o Estados Unidos, que están jugando ahora.
El partido será el sábado 5 de julio a las 13.
Alejandro Sabella, el técnico, deberá sacar enseñanzas de este partido, para buscar mayor ensamble en un equipo que sigue mostrando desequilibrios entre defensa y ataque.
Esta vez los delanteros buscaron pero tropezaron con el vallado que impuso Suiza, que también salió rápido de contra y comprometió a una defensa que sigue provocando preocupación.
En el próximo encuentro no podrá estar Marcos Rojo y habrá que ver qué cambio decide el técnico. En esta ocasión entró Basanta, lo que hace suponer que será quien ocupará ese lugar.
Los 90 minutos fueron parejos, con momentos de cada uno, sin supremacías. La defensa argentina volvió a mostrar falencias, destacándose el arquero Romero cuando tuvo que responder.
Marcos Rojo, sin duda uno de los jugadores más importantes de este ciclo mundial, recibió tarjeta amarilla y no podrá jugar en la próxima ronda.
Los 30 minutos suplementarios fueron parecidos a lo que había pasado anteriormente. El seleccionado albiceleste realizó tres cambios: Basanta por el lesionado Rojo, Biglia por Gago y Palacio por Lavezzi.
Cuando parecía que todo terminaba en el drama de los penales, se iluminó la lámpara de Lionel Messi, quien tras recibir de Palacio, superó a dos rivales a puro talento y cedió a Di María, quien doblegó al buen arquero suizo.
Suiza no se conformó y fue a buscar el empate. Lo tuvo pero el poste primero y el rebote posterior terminaron con el balón afuera, cuando parecía que era gol.
Con suspenso y altibajos -¿estos muchachos serán apodados los caballeros de la angustia?- la Argentina pasó a cuartos de final y ahora espera por el próximo rival, que será Bélgica o Estados Unidos, que están jugando ahora.
El partido será el sábado 5 de julio a las 13.
Alejandro Sabella, el técnico, deberá sacar enseñanzas de este partido, para buscar mayor ensamble en un equipo que sigue mostrando desequilibrios entre defensa y ataque.
Esta vez los delanteros buscaron pero tropezaron con el vallado que impuso Suiza, que también salió rápido de contra y comprometió a una defensa que sigue provocando preocupación.
En el próximo encuentro no podrá estar Marcos Rojo y habrá que ver qué cambio decide el técnico. En esta ocasión entró Basanta, lo que hace suponer que será quien ocupará ese lugar.
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