LOS RECUERDOS


Pedro Costa escribió lo siguiente sobre la obra Su majestad se pasea en calzoncillos. "Corría el año 1973. Un importante grupo de alumnos de séptimo grado del colegio salesiano de Bernal, entre otras cosas y a instancias de sus maestros puso en escena Su majestad..., una versión más libre del cuento El traje njuevo del emperador, de Hans Christian Andersen.
El emprendimiento tenía un doble propósito: hacer teatro y juntar fondos para contribuir con el viaje de egresados a Córdoba.
El proyecto tuvo amplia repercusión y se cumplieron los objetivos deseados. Para esos chicos fue una oportunidad de expresión, el intento de probar con un lenguaje desconocido, jugar a ser otros por un instante, establecer mejores vínculos entre sí y todos esos beneficios que da el teatro, especialmente en la infancia.
Se cumplen 40 años de aquel hecho que, en cierto sentido, dejó huellas en cada uno que participó. Es por eso que, otra vez como juego, otra vez como celebración de la amistad y el trabajo en grupo, otra vez como juego expresivo, otra vez como un escolar recreo para el alma, otra vez desde las ganas profundas, se comenzó a ensayar Su majestad...
En el mismo colegio, sobre el mismo escenario, los mismos actores y el mismo director, sólo que con cuarenta años encima. Una fiesta.
La obra fue reescrita y constituye un homenaje que estos "hombres grandes" le tributan a aquellos niños que fueron.
Lejos del peligroso riesgo de la melancolía, Su majestad... es un canto a la pasión y a los vínculos entre las personas. Sobre el viejo tablado salesiano se cruzan personas grandes con distintas historias de vida, con profesiones diversas, con caminos disímiles que, en un momento determinado y por obra y gracia de la escena, confluyen en un logro común, una obra que es de todos y de ninguno en particular. Maravilla del teatro, maravilla de la escuela, en definitiva.
Hubo sacrificio y constancia, condiciones básicas para la creación artística. Mucho trabajo desde abril de este año (2013) donde alguno ha viajado mensualmente desde el interior para asistir a los ensayos especialmente diseñados o quien, desde el exterior ha estudiado el texto y ensayó ante su computadora hasta diez días antes del estreno en que llegó a nuestro país.
Hubo cercanía y colaboración de amigos, hijos y esposas de estas personas que decidieron hacer un nuevo proyecto a partir de una locura de la infancia".
Todo dicho. Pedro Costa, el maestro, el artista, el gran hacedor de este milagro de Su majestad..., que deja reflexionando al espectador porque hoy, 2014, hay muchos que como su majestad siguen paseando en calzoncillos y no dejan que se los vea como realmente son.

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