Curiosas volteretas del destino, pero ayer perdieron Boca y River. Mientras los Xeneizes cayeron en su visita a Arsenal de Sarandí, el equipo que conduce Gustavo Alfaro y que dio un gran paso para sostener sus sueños de un nuevo título -justamente en la próxima visita a Newell`s en gran partido, los rosarinos juegan esta noche en Victoria con Tigre y si ganan serán líderes en soledad- River perdió con el peor promedio del torneo, Olimpo, en el Monumental.
Este Olimpo, que había puesto en duda la continuidad del técnico Walter Perazzo, parece haber tenido una enorme ayuda de los dioses para superar a un River que no encuentra el rumbo en este torneo (será rival de Quilmes en el Centenario en principio el domingo 8 de diciembre).
El mismo día, los dos grandes del fútbol argentino, no tanto en lo futbolístico últimamente, resignaron puntos ante adversarios que otrora festejaban un empate. Y hoy se animan como el que más.
Este Olimpo, que había puesto en duda la continuidad del técnico Walter Perazzo, parece haber tenido una enorme ayuda de los dioses para superar a un River que no encuentra el rumbo en este torneo (será rival de Quilmes en el Centenario en principio el domingo 8 de diciembre).
El mismo día, los dos grandes del fútbol argentino, no tanto en lo futbolístico últimamente, resignaron puntos ante adversarios que otrora festejaban un empate. Y hoy se animan como el que más.
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