Desde las 18.15 estarán jugando en Sarandí, Quilmes y Arsenal, por la fecha 17 del torneo Final, un partido fundamental para que el Cervecero se quede en primera y también para Independiente, que estará esperando un triunfo de su hijo dilecto, el Arsenal de los Grondona, para que le dé una mano y el propio Rojo dársela a sí mismo mañana cuando deba visitar a las 14 a River en el Monumental.
En Sarandí, donde espera una gran concurrencia de hinchas quilmeños y también de hinchas de Arsenal, mezclados con los de Independiente que seguramente irán a apoyar al equipo de Alfaro, va a dirigir Carlos Maglio.
Pero también hay otro partido que interesa a Quilmes e Independiente: a las 16 en Córdoba, San Martín de San Juan irá por la hazaña ante un Belgrano que se hace muy difícil en su reducto.
Acotemos que otro encuentro que interesa es el que jugarán el lunes, finalmente a las 21.15, en el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo y Argentinos Juniors.
¿Qué puede pasar en Sarandí? Quilmes puede alcanzar la gloria, si gana en un lugar que siempre le resultó problemático o tendrá que esperar una semana más cuando llegue Godoy Cruz al Centenario. El equipo de De Felippe tendrá que cuidarse de las jugadas de pelota parada, las que son el arma letal que maneja Arsenal y que tantas satisfacciones le dio en los últimos tiempos. Recordemos que el de Alfaro tiene como goleador a un defensor, Lisandro López, que capitaliza de cabeza toda pelota parada que llega al área rival.
Quilmes va con el mismo equipo que le ganó a Racing -Chirola Romero estará en el banco- y tendrá dos delanteros para tratar de vencer a Campestrini: Cauteruccio y Menéndez.
Cabe anhelar que más allá de lo que se juega y del ambiente que se vive en Avellaneda, por la situación de Independiente y la respuesta de Racing, en el Viaducto sólo haya que hablar de fútbol.
En Sarandí, donde espera una gran concurrencia de hinchas quilmeños y también de hinchas de Arsenal, mezclados con los de Independiente que seguramente irán a apoyar al equipo de Alfaro, va a dirigir Carlos Maglio.
Pero también hay otro partido que interesa a Quilmes e Independiente: a las 16 en Córdoba, San Martín de San Juan irá por la hazaña ante un Belgrano que se hace muy difícil en su reducto.
Acotemos que otro encuentro que interesa es el que jugarán el lunes, finalmente a las 21.15, en el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo y Argentinos Juniors.
¿Qué puede pasar en Sarandí? Quilmes puede alcanzar la gloria, si gana en un lugar que siempre le resultó problemático o tendrá que esperar una semana más cuando llegue Godoy Cruz al Centenario. El equipo de De Felippe tendrá que cuidarse de las jugadas de pelota parada, las que son el arma letal que maneja Arsenal y que tantas satisfacciones le dio en los últimos tiempos. Recordemos que el de Alfaro tiene como goleador a un defensor, Lisandro López, que capitaliza de cabeza toda pelota parada que llega al área rival.
Quilmes va con el mismo equipo que le ganó a Racing -Chirola Romero estará en el banco- y tendrá dos delanteros para tratar de vencer a Campestrini: Cauteruccio y Menéndez.
Cabe anhelar que más allá de lo que se juega y del ambiente que se vive en Avellaneda, por la situación de Independiente y la respuesta de Racing, en el Viaducto sólo haya que hablar de fútbol.
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