Juegan esta noche a las 21 Quilmes y Racing en el Centenario, arbitra Saúl Laverni y el partido tiene todos los condimentos. Todos los ojos estarán puestos en el encuentro, del que se ha montado un escenario de sospecha que mueve y conmueve. Porque desde el recuerdo del histórico encuentro del 8 de noviembre de 1977 -recurrir al informe del Decano, obra del doctor Carluccio, que en fascículos publicaba el diario El Sol es una buena data para conocer detalles del partido que terminó 1 a 1, con goles de Fortunato y Glaría, y del que siempre se dijo que hubo acuerdo previo, para salvar a la Academia del fantasma del descenso- hasta las publicaciones de presuntos "hinchas" de Racing, deseosos de que su equipo pierda para no favorecer a Independiente constituyen ingredientes para esta ensalada del fútbol que cada vez despierta más intríngulis.
El propio presidente de la Academia, Cogorno, dijo que una era su opinión como hincha y otra como alto directivo. En el primer caso insinuó lo que piden esos "hinchas" citados más arriba, pero como presidente sentía que el equipo debe ir a ganar.
Así las cosas todos los medios se han encargado de dar al partido esta característica, y se llegó al increíble escenario de que las agencias internacionales de apuestas han retirado el encuentro de circulación, por el manto de sospecha que se ha tendido.
Ahora bien, el fútbol, un negocio sin duda, sea para todos o no, se transforma en el ejemplo de este encuentro en una mira de atracción. Para saber si finalmente Racing pondrá todo o será un equipo "suave" para que Quilmes aproveche.
El técnico de Quilmes dijo que estos rumores le hacen muy mal al fútbol y justificó que su equipo necesita ganar por el tema del promedio, más allá de lo se diga. Porque Quilmes perdió con Velez, no porque se lo propuso sino porque cometió errores y no aprovechó las oportunidades que tuvo.
Hay un partido símbolo de este tema de dudas y sospechas. Porque si se hace caso a todo lo que se dice ("los muchachos que saben") entonces Independiente fue a menos contra Boca en aquel encuentro que empataron tiempo atrás, porque el Rojo debió ganarlo con amplitud y sin embargo falló en más de una decena de ocasiones inminentes de gol.
O, con el mismo argumento, Tigre falló a propósito cuando recibió al Rojo, porque un defensor cometió un error en el primer gol que "sorprendió" al arquero García y en el segundo gol, el "sorprendido" García mostró mucha ingenuidad en su reacción.
Si el manto de sospecha se estira, entonces habrá que pensar que todo error en defensa puede ser cometido ex profeso o todo gol malogrado, también.
¿Qué pasa si todos hablan de sospecha y de pronto el arquero Trípodi -que no ha tenido un buen partido en Liniers- comete una falla que le cuesta un gol? ¿Se va a sospechar de él porque el 30 de junio vence su contrato y está difícil la continuidad? Con todo lo que le dio Trípodi al equipo, sospechar de esa manera sería de hipócrita, aunque hay hinchas que se hicieron escuchar en las radios partidarios, pidiéndole al técnico que recurra a Dulcich, quien cumplió una soberbia labor ante Newell`s. Esos hinchas nada dicen de las increíbles ocasiones que malogró el Rosarino, incluido el penal de Scocco, que si bien contuvo magistralmente Dulcich también fue error del delantero (que sí anotó los que le tocó rematar en la dramática definición por penales con Boca por la Copa Libertadores).
Hablar, siempre se va a hablar. Y después del resultado, estarán los que digan: ¿viste? Estaba todo arreglado o bien, ¿viste? El fútbol le dio un cachetazo a la suspicacia.
Fútbol pasión de multitudes, según José María Muñoz, Dinámica de lo impensado, versión Dante Panzeri.
Esta noche en el Centenario se vivirá una página más, que viene dando que hablar desde hace días y que sin duda seguirá haciendo correr ríos de tinta en los próximos. Ojalá Quilmes gane sin ayuda ni suspicacias, porque el Decano pone toda la carne al asador, en base a los elementos de que dispone el técnico, superando el mar de lesiones que lo hacen navegar por aguas encrespadas.
PD: Si bien las agencias internacionales retiraron el partido de las apuestas, la local Spingol puede generar un gran negocio en quienes apuesten por la Academia, ya que se va a pagar una importante suma por cada peso invertido. ¿Esto de las sospechas no será una gran maquinaria para hacer un enorme negocio?
El propio presidente de la Academia, Cogorno, dijo que una era su opinión como hincha y otra como alto directivo. En el primer caso insinuó lo que piden esos "hinchas" citados más arriba, pero como presidente sentía que el equipo debe ir a ganar.
Así las cosas todos los medios se han encargado de dar al partido esta característica, y se llegó al increíble escenario de que las agencias internacionales de apuestas han retirado el encuentro de circulación, por el manto de sospecha que se ha tendido.
Ahora bien, el fútbol, un negocio sin duda, sea para todos o no, se transforma en el ejemplo de este encuentro en una mira de atracción. Para saber si finalmente Racing pondrá todo o será un equipo "suave" para que Quilmes aproveche.
El técnico de Quilmes dijo que estos rumores le hacen muy mal al fútbol y justificó que su equipo necesita ganar por el tema del promedio, más allá de lo se diga. Porque Quilmes perdió con Velez, no porque se lo propuso sino porque cometió errores y no aprovechó las oportunidades que tuvo.
Hay un partido símbolo de este tema de dudas y sospechas. Porque si se hace caso a todo lo que se dice ("los muchachos que saben") entonces Independiente fue a menos contra Boca en aquel encuentro que empataron tiempo atrás, porque el Rojo debió ganarlo con amplitud y sin embargo falló en más de una decena de ocasiones inminentes de gol.
O, con el mismo argumento, Tigre falló a propósito cuando recibió al Rojo, porque un defensor cometió un error en el primer gol que "sorprendió" al arquero García y en el segundo gol, el "sorprendido" García mostró mucha ingenuidad en su reacción.
Si el manto de sospecha se estira, entonces habrá que pensar que todo error en defensa puede ser cometido ex profeso o todo gol malogrado, también.
¿Qué pasa si todos hablan de sospecha y de pronto el arquero Trípodi -que no ha tenido un buen partido en Liniers- comete una falla que le cuesta un gol? ¿Se va a sospechar de él porque el 30 de junio vence su contrato y está difícil la continuidad? Con todo lo que le dio Trípodi al equipo, sospechar de esa manera sería de hipócrita, aunque hay hinchas que se hicieron escuchar en las radios partidarios, pidiéndole al técnico que recurra a Dulcich, quien cumplió una soberbia labor ante Newell`s. Esos hinchas nada dicen de las increíbles ocasiones que malogró el Rosarino, incluido el penal de Scocco, que si bien contuvo magistralmente Dulcich también fue error del delantero (que sí anotó los que le tocó rematar en la dramática definición por penales con Boca por la Copa Libertadores).
Hablar, siempre se va a hablar. Y después del resultado, estarán los que digan: ¿viste? Estaba todo arreglado o bien, ¿viste? El fútbol le dio un cachetazo a la suspicacia.
Fútbol pasión de multitudes, según José María Muñoz, Dinámica de lo impensado, versión Dante Panzeri.
Esta noche en el Centenario se vivirá una página más, que viene dando que hablar desde hace días y que sin duda seguirá haciendo correr ríos de tinta en los próximos. Ojalá Quilmes gane sin ayuda ni suspicacias, porque el Decano pone toda la carne al asador, en base a los elementos de que dispone el técnico, superando el mar de lesiones que lo hacen navegar por aguas encrespadas.
PD: Si bien las agencias internacionales retiraron el partido de las apuestas, la local Spingol puede generar un gran negocio en quienes apuesten por la Academia, ya que se va a pagar una importante suma por cada peso invertido. ¿Esto de las sospechas no será una gran maquinaria para hacer un enorme negocio?
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