Pasó Independiente y Quilmes sigue remando el torneo para permanecer. Aunque apenas cosechó un punto, vale muchísimo para imaginar que se puede cumplir el objetivo.
Quilmes fue más que el Diablo en el balance de los 90 minutos, porque en la mayoría del partido impuso sus intenciones de victoria, a pesar de nublarse de ideas en el primer tramo, dejando que Independiente, sin demasiadas luces, marcara un predominio.
Luego equilibró el local y terminó dejando mejor imagen, convirtiendo a Rodríguez, el arquero visitante en figura.
En el Cervecero se destacó la voluntad que todos pusieron, entre ellos los arietes Oberman y Menéndez, pese a que el ex Lanús no estuvo en una de sus mejores tarde. Pero aportó siempre entrega y esfuerzo. Quizás el técnico tendría que haberlo cambiado antes, porque pagó caro el sacrificio realizado.
Si Cauteruccio y Telechea hubiesen entrada antes podría haber sido otra la historia. Porque Quilmes buscaba la victoria, el arquero Rojo se destacaba y esos ingresos hubiesen dado aire fresco a la voluntad del Decano.
De todas maneras, el punto cotiza mucho más que lo que pudo cosechar el rival, que sigue en la zona de descenso y con un manto de preocupación hacia el futuro. En la próxima Independiente recibirá a Boca y deberá mejorar mucho para cambiar su imagen. El técnico Gallego tendrá tiempo para ajustar los desequilibrios y podrá contar con el retorno del emblema del equipo, como es el Rolfi Montenegro, quien regresó de México apostando a no sufrir el peor desencanto para uno de los dos grandes que nunca descendieron (el otro es Boca).
Quilmes cuenta con tiempo más que valioso para prepararse de cara a las 13 fechas que restan, o sea 39 puntos en juego de los que deberá sumar 20 para quedar afuera de cualquier inconveniente.
De entrada el rival será este encumbrado Lanús, que con los mellizos Barros Schelotto, se ha convertido en protagonista, jugando a un alto nivel y contando con una capacidad goleadora importante.
Quilmes también demostró en lo que va del torneo Final potencia goleadora, pese a no haber anotado ante Independiente, pero todavía debe ajustar detalles en defensa para no ser sorprendido, como le ocurrió con Rafaela e incluso con Argentinos Juniors.
En este partido con Independiente el Cervecero tuvo dudas en el principio, marcadas en Olivera, quien se equivocó feo y casi sirve el gol al delantero Caicedo. De todas maneras, para el encuentro con Lanús tendrá la posibilidad de contar con Cobo en el medio, habrá que ver de qué manera se recupera Carli, aunque es cierto que Sebastián Martínez jugó un gran partido y prácticamente borró del campo de juego a Caicedo, quien sólo contó con dos situaciones desperdiciadas, una por el error de Olivera y otra por sus méritos, y en el momento clave se le adelantó el balón y malogró una chance inmejorable.
Lo que viene, tras las elimintorias para el Mundial, será decisivo y Quilmes deberá poner todas las pilas para alcanzar el objetivo. En el haber y como positivo, vale señalar que se espera con mucha ansiedad los retornos de Miguel Caneo y de Pablo Garnier, dos figuras del equipo que llevan varios meses de ausencia por graves lesiones.
Quilmes fue más que el Diablo en el balance de los 90 minutos, porque en la mayoría del partido impuso sus intenciones de victoria, a pesar de nublarse de ideas en el primer tramo, dejando que Independiente, sin demasiadas luces, marcara un predominio.
Luego equilibró el local y terminó dejando mejor imagen, convirtiendo a Rodríguez, el arquero visitante en figura.
En el Cervecero se destacó la voluntad que todos pusieron, entre ellos los arietes Oberman y Menéndez, pese a que el ex Lanús no estuvo en una de sus mejores tarde. Pero aportó siempre entrega y esfuerzo. Quizás el técnico tendría que haberlo cambiado antes, porque pagó caro el sacrificio realizado.
Si Cauteruccio y Telechea hubiesen entrada antes podría haber sido otra la historia. Porque Quilmes buscaba la victoria, el arquero Rojo se destacaba y esos ingresos hubiesen dado aire fresco a la voluntad del Decano.
De todas maneras, el punto cotiza mucho más que lo que pudo cosechar el rival, que sigue en la zona de descenso y con un manto de preocupación hacia el futuro. En la próxima Independiente recibirá a Boca y deberá mejorar mucho para cambiar su imagen. El técnico Gallego tendrá tiempo para ajustar los desequilibrios y podrá contar con el retorno del emblema del equipo, como es el Rolfi Montenegro, quien regresó de México apostando a no sufrir el peor desencanto para uno de los dos grandes que nunca descendieron (el otro es Boca).
Quilmes cuenta con tiempo más que valioso para prepararse de cara a las 13 fechas que restan, o sea 39 puntos en juego de los que deberá sumar 20 para quedar afuera de cualquier inconveniente.
De entrada el rival será este encumbrado Lanús, que con los mellizos Barros Schelotto, se ha convertido en protagonista, jugando a un alto nivel y contando con una capacidad goleadora importante.
Quilmes también demostró en lo que va del torneo Final potencia goleadora, pese a no haber anotado ante Independiente, pero todavía debe ajustar detalles en defensa para no ser sorprendido, como le ocurrió con Rafaela e incluso con Argentinos Juniors.
En este partido con Independiente el Cervecero tuvo dudas en el principio, marcadas en Olivera, quien se equivocó feo y casi sirve el gol al delantero Caicedo. De todas maneras, para el encuentro con Lanús tendrá la posibilidad de contar con Cobo en el medio, habrá que ver de qué manera se recupera Carli, aunque es cierto que Sebastián Martínez jugó un gran partido y prácticamente borró del campo de juego a Caicedo, quien sólo contó con dos situaciones desperdiciadas, una por el error de Olivera y otra por sus méritos, y en el momento clave se le adelantó el balón y malogró una chance inmejorable.
Lo que viene, tras las elimintorias para el Mundial, será decisivo y Quilmes deberá poner todas las pilas para alcanzar el objetivo. En el haber y como positivo, vale señalar que se espera con mucha ansiedad los retornos de Miguel Caneo y de Pablo Garnier, dos figuras del equipo que llevan varios meses de ausencia por graves lesiones.
Comentarios