Omar De Felippe está en la cuerda floja. Una constante en el Cervecero de los últimos tiempos, ya sea en la era Meiszner, como hoy en la del presidente Aníbal Fernández.
Cada vez que los resultados no acompañan comienza a hablarse del futuro del técnico, que entra en la cuerda floja si no llegan las victorias.
Ahora se dice que el partido del domingo a las 17 con All Boys puede ser la bisagra para el futuro, porque el equipo ya lleva 9 partidos sin victorias, y los puntos son necesarios para la permanencia.
Adrián Di Blasi habló ayer en el noticiero televisivo local de los próximos 9 puntos -Quilmes recibe a All Boys, luego viaja a Santa Fe para jugar el sábado 23 a las 17 con Unión y el viernes 1 de marzo recibe a Atlético Rafaela por la noche- aunque dejó abierta la versión de lo que podría pasar con un mal resultado el domingo.
Quilmes necesita sumar, de eso no quedan dudas, pero más que nada requiere que se aclaren las cosas. Porque tendría que haber un plan, más allá del resultado, de cara al futuro. Ya sea en primera como en el Nacional B. Quilmes sigue en la oscuridad de los últimos tiempos de no armar proyectos o por lo menos ponerlos en práctica y llevarlos hasta las últimas consecuencias.
Hace muchos años Gustavo Alfaro dirigía al equipo en el Nacional B y estaba en la picota porque no llegaban los resultados. De pronto perdió de local 3 a 0 con San Martín de San Juan y llovieron las críticas, nadie daba un peso por la continuidad ... y sólo el diario EL SOL defendió al técnico, sosteniendo su permanencia. Pasó el tiempo, siguió Alfaro y terminó ascendiendo. En el siguiente torneo, de primera división, Alfaro y su equipo logró 60 puntos, un record, y clasificó para la Copa Libertadores.
Tiempo después, eso se dejó de lado y se fueron dando todos los avatares de siempre, con los cambios de técnico, ascensos y descensos, y nunca un proyecto en práctica.
Ahora se está a tiempo de armar las cosas como proyecto y llevarlas a la práctica, más allá de los resultados.
Incluso quien concurre a ver la reserva, que el otro día goleó 3 a 0 a Tigre, se puede dar cuenta de que si se apuesta al futuro se podrán cosechas frutos. Por supuesto, manteniendo la base y no dejándose llevar por la desesperación. El ejemplo Lanús tendría que ser el modelo, no a copiar sino a imitar ... porque hoy el Granate puede construir todos los días cosas porque tiene base. Para ello, hay que armar la base.. Alguna vez lo hará Quilmes?
PD Los desesperados ya hacen correr rumores sobre eventuales candidatos si se va De Felippe, se habla de Caruso Lombardi, Nelson Vivas... hasta de Alfredo Grelak, el técnico de la reserva.
Cada vez que los resultados no acompañan comienza a hablarse del futuro del técnico, que entra en la cuerda floja si no llegan las victorias.
Ahora se dice que el partido del domingo a las 17 con All Boys puede ser la bisagra para el futuro, porque el equipo ya lleva 9 partidos sin victorias, y los puntos son necesarios para la permanencia.
Adrián Di Blasi habló ayer en el noticiero televisivo local de los próximos 9 puntos -Quilmes recibe a All Boys, luego viaja a Santa Fe para jugar el sábado 23 a las 17 con Unión y el viernes 1 de marzo recibe a Atlético Rafaela por la noche- aunque dejó abierta la versión de lo que podría pasar con un mal resultado el domingo.
Quilmes necesita sumar, de eso no quedan dudas, pero más que nada requiere que se aclaren las cosas. Porque tendría que haber un plan, más allá del resultado, de cara al futuro. Ya sea en primera como en el Nacional B. Quilmes sigue en la oscuridad de los últimos tiempos de no armar proyectos o por lo menos ponerlos en práctica y llevarlos hasta las últimas consecuencias.
Hace muchos años Gustavo Alfaro dirigía al equipo en el Nacional B y estaba en la picota porque no llegaban los resultados. De pronto perdió de local 3 a 0 con San Martín de San Juan y llovieron las críticas, nadie daba un peso por la continuidad ... y sólo el diario EL SOL defendió al técnico, sosteniendo su permanencia. Pasó el tiempo, siguió Alfaro y terminó ascendiendo. En el siguiente torneo, de primera división, Alfaro y su equipo logró 60 puntos, un record, y clasificó para la Copa Libertadores.
Tiempo después, eso se dejó de lado y se fueron dando todos los avatares de siempre, con los cambios de técnico, ascensos y descensos, y nunca un proyecto en práctica.
Ahora se está a tiempo de armar las cosas como proyecto y llevarlas a la práctica, más allá de los resultados.
Incluso quien concurre a ver la reserva, que el otro día goleó 3 a 0 a Tigre, se puede dar cuenta de que si se apuesta al futuro se podrán cosechas frutos. Por supuesto, manteniendo la base y no dejándose llevar por la desesperación. El ejemplo Lanús tendría que ser el modelo, no a copiar sino a imitar ... porque hoy el Granate puede construir todos los días cosas porque tiene base. Para ello, hay que armar la base.. Alguna vez lo hará Quilmes?
PD Los desesperados ya hacen correr rumores sobre eventuales candidatos si se va De Felippe, se habla de Caruso Lombardi, Nelson Vivas... hasta de Alfredo Grelak, el técnico de la reserva.
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