Una ajustada victoria obtuvo esta tarde Quilmes en su reducto del Centenario. El Cervecero venció a Unión de Santa Fe por 2 a 1, con goles de Pablo Lima, de tiro libre y de Joel Carli, de cabeza. El Tatengue había logrado un transitorio empate a través de Avendaño.
Quilmes llegó a la punta con 7 unidades, un puesto compartido, pero que sirve para afirmar el objetivo de la permanencia, que significa en principio alcanzar los 50 puntos, o sea que restan 43.
Más allá del liderazgo, vale repetirlo compartido, lo importante es que Quilmes sumó su segunda victoria de local, y ahora se prepara para visitar el próximo domingo a las 15 al siempre difícil Atlético Rafaela, en un reducto muy complicado.
El primer tiempo fue muy disputado. Ni Quilmes ni Unión se sacaron ventajas, y si bien el local se puso al frente a los 31 minutos con un soberbio tiro libre del ex Colón, Pablo Lima, rápidamente empató el santafesino, tras una jugada de pelota parada.
En la segunda etapa, Quilmes salió decidido a buscar la victoria. El rival se limitó a defenderse y se aferró la igualdad. Desde el arquero que hacía cuanto tiempo podía hasta el resto, lo de los tatengues era simplemente esperar y de vez en cuando buscar pelotazos aéreos para su ariete Nuñez.
Trípodi tuvo un segundo tiempo prácticamente tranquilo, salvo alguno que otro sofocón. Quilmes buscó la victoria, tuvo sus oportunidades, haciendo lucir al arquero Limia, destacándose el delantero Cauteruccio al que sólo le faltó el gol, porque las oportunidades que tuvo fueron varias, entre ellas una gran jugada, quedando mano a mano con Limia y rematando apenas desviado.
Tanto fue el cántaro a la fuente que antes de los diez minutos finales llegó la justicia: Joel Carli cabeceó un córner y dejó sin chances al arquero visitante.
De ahí en más, Unión quiso empatar pero no tuvo ideas.
Quilmes celebró una victoria muy importante en el cumplimiento del objetivo. El triunfo se valora más porque no estuvo el estratega de Quilmes, Miguel Caneo, preservado por una lesión (podrá volver el domingo en Rafaela).
Pese a la ausencia de Caneo -quien pareció sentirla fue el 5 Cobo, quien se mostró perdido en el medio, discontinuo, con reiteración de pases deficientes- Quilmes encontró la manera, con la recuperación de Romero en el complemento, más el crecimiento de Leandro Díaz y la labor esforzada de siempre de Garnier, para alimentar a un Cauteruccio que parece intratable.
Los ingresos de Gimenez por Diz, Serrano por Quilez y de Mansilla por Diaz no cambiaron demasiado las cosas y sirvieron para justificar el triunfo del local.
Durán, ¿brujo?
Mérito para el comentarista de la campaña de Quilmes por FM Q, Rubén Durán, quien previamente a este partido había arreglado con Carli que éste regalara la camiseta, el pantalón y hasta las medias de este partido, si hacía un gol. Durán le preguntó al defensor cuánto hacía que no anotaba y Carli respondía que había olvidado esa circunstancia porque hacía mucho tiempo que no concretaba. Entonces Durán le anunció, a modo de premonición, que iba a hacer el gol contra Unión desde un córner. Carli dijo que si eso pasaba, iba a dar su camiseta, pantalón y medias para ser sorteados entre los oyentes de la emisora. Ahora, deberá cumplir la promesa, pero vale destacar la corazonada del periodista.
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