Recién dentro de doce días volverá a jugar Quilmes por la Primera B Nacional, cuando visite en Cordoba a Instituto, en partido fundamental para ambos: Quilmes, de ganar, seguirá alentando alguna esperanza de ascenso directo e Instituto, que comparte el segundo lugar con River, necesita triunfar para no perderle pisada a los Millonarios (recibirán a Boca Unidos de Corrientes). Recordemos que el líder es Central, que en la próxima fecha visitará a Patronato de Paraná, probablemente en Colón de Santa Fe.
Quilmes ya se aseguró un lugar en la Promoción y sólo le resta saber quién será el rival (son varios los candidatos a ese lugar, como Tigre, San Lorenzo, Unión, San Martín de San Juan, Atlético Rafaela, incluso el que viene cayendo estrepitosamente, Banfield).
Mientras espera Quilmes prepara su trabajo para lo que viene. Pensar en el ascenso directo suena a utopía, sobre todo porque tanto Central como River, a priori, no tienen compromisos complicados en las tres fechas que restan. En ese sentido, Instituto, primero y Quilmes, luego son los que más posibilidad tienen de terminar jugando la Promoción. Por eso adquiere fundamental importancia el choque de estos equipos en Córdoba.
Teniendo en cuenta lo que falta para la reanudación de la competencia, es bueno hacer un balance de lo realizado.
¿La campaña de Quilmes es buena? Desde todo punto de vista la respuesta es positiva, porque no hay que olvidar que el Cervecero sufrió dos golpes, que le afectaron. Uno, la salida de su técnico, el otro, la lesión de Telechea.
La ausencia de Telechea supone haber resignado por lo menos cinco goles, los que hubiesen dado puntos, que a esta altura del torneo serían vitales.
El otro motivo de defección fue el cambio de técnico. Y si bien Caruso Lombardi lo dejó bien ubicado, y se entendía que sólo había que seguir en la misma brecha, la realidad, al menos en este caso, indica que el cambio de conductor se sintió. No ya en el primer partido, allá en Tucumán con goleada, sino en los restantes. Incluso el partido emblemático, contra Central en Quilmes, dejó más que nunca la sensación del efecto del cambio.
Porque, teniendo en cuenta el partido que remontó San Lorenzo ante Newell`s, con un primer tiempo más que pálido, la reacción del segundo tiempo dejó claro que el técnico tuvo en el vestuario su aporte, como para que el equipo saliera a jugar el complemento con otra actitud y con un final más que saludable.
Entonces, el balance de Quilmes es positivo, por donde se lo mire. Tampoco hay que olvidar que en el torneo aparecieron dos pesos pesados, como River y Central. Incluso el puntaje que sumó Quilmes, en otras circunstancias, hubiese sido fundamental para el ascenso directo. Hoy eso no es posible por la presencia de los antes citados.
Leandro Diaz, el mediocampista quilmeño, fue claro al evaluar la situación: River tuvo que traer del exterior a Cavenaghi, Trezeguet y el Chori Domínguez, desembolsando mucho dinero, para tratar de volver rápidamente a primera y contra todo lo esperado, todavía no alcanzó el objetivo, aunque está bastante cerca. Perlo para asegurarse la meta tuvo que apelar al dinero y a la calidad futbolística.
En ese sentido, Quilmes todavía tiene su ocasión. Si el ascenso directo no se concreta, como todo hace suponer, habrá que apostar todas las fichas a la Promoción. Es una gran chance, un tren que no debe dejarse pasar.
Quilmes ya se aseguró un lugar en la Promoción y sólo le resta saber quién será el rival (son varios los candidatos a ese lugar, como Tigre, San Lorenzo, Unión, San Martín de San Juan, Atlético Rafaela, incluso el que viene cayendo estrepitosamente, Banfield).
Mientras espera Quilmes prepara su trabajo para lo que viene. Pensar en el ascenso directo suena a utopía, sobre todo porque tanto Central como River, a priori, no tienen compromisos complicados en las tres fechas que restan. En ese sentido, Instituto, primero y Quilmes, luego son los que más posibilidad tienen de terminar jugando la Promoción. Por eso adquiere fundamental importancia el choque de estos equipos en Córdoba.
Teniendo en cuenta lo que falta para la reanudación de la competencia, es bueno hacer un balance de lo realizado.
¿La campaña de Quilmes es buena? Desde todo punto de vista la respuesta es positiva, porque no hay que olvidar que el Cervecero sufrió dos golpes, que le afectaron. Uno, la salida de su técnico, el otro, la lesión de Telechea.
La ausencia de Telechea supone haber resignado por lo menos cinco goles, los que hubiesen dado puntos, que a esta altura del torneo serían vitales.
El otro motivo de defección fue el cambio de técnico. Y si bien Caruso Lombardi lo dejó bien ubicado, y se entendía que sólo había que seguir en la misma brecha, la realidad, al menos en este caso, indica que el cambio de conductor se sintió. No ya en el primer partido, allá en Tucumán con goleada, sino en los restantes. Incluso el partido emblemático, contra Central en Quilmes, dejó más que nunca la sensación del efecto del cambio.
Porque, teniendo en cuenta el partido que remontó San Lorenzo ante Newell`s, con un primer tiempo más que pálido, la reacción del segundo tiempo dejó claro que el técnico tuvo en el vestuario su aporte, como para que el equipo saliera a jugar el complemento con otra actitud y con un final más que saludable.
Entonces, el balance de Quilmes es positivo, por donde se lo mire. Tampoco hay que olvidar que en el torneo aparecieron dos pesos pesados, como River y Central. Incluso el puntaje que sumó Quilmes, en otras circunstancias, hubiese sido fundamental para el ascenso directo. Hoy eso no es posible por la presencia de los antes citados.
Leandro Diaz, el mediocampista quilmeño, fue claro al evaluar la situación: River tuvo que traer del exterior a Cavenaghi, Trezeguet y el Chori Domínguez, desembolsando mucho dinero, para tratar de volver rápidamente a primera y contra todo lo esperado, todavía no alcanzó el objetivo, aunque está bastante cerca. Perlo para asegurarse la meta tuvo que apelar al dinero y a la calidad futbolística.
En ese sentido, Quilmes todavía tiene su ocasión. Si el ascenso directo no se concreta, como todo hace suponer, habrá que apostar todas las fichas a la Promoción. Es una gran chance, un tren que no debe dejarse pasar.
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