Quilmes derrotó a Atlético Tucumán por 2 a 0, con los goles de Garnier y Cauteruccio.
Con esta victoria, el Cervecero suma 15 puntos en la tabla, y mira expectante el futuro.
El próximo lunes a las 21 visita a Rosario Central en el siempre difícil reducto de Arroyito, con el arbitraje de Néstor Pitana.
Quilmes tuvo un aceptable primer tiempo, donde justificó la victoria parcial con el gol de Garnier, después de una corajeada del jujeño.
En el complemento, Quilmes tuvo más problemas para contener a los tucumanos, que generaron cuatro situaciones claras, y ahí se destacó el arquero Trípodi, quien está volviendo a ser el de otrora.
Cuando las cosas parecian complicarse, llegó un gran centro de Caneo y Cauteruccio de cabeza puso el 2 a 0, y tranquilizó las aguas.
Quedó como saldo la importancia de la victoria, aunque algunas dudas que tendrá que despejar el técnico, teniendo en cuenta lo que se viene.
Fue una noche atípica, con un partido que terminó sobre la medianoche, estableciendo un auténtico record, con las exigencias de la televisión y el fútbol para todos.
El Cervecero tendrá que rearmar el medio campo, para buscar mayor ensamble, y atrás debera superar fallas, que hoy mostraron sobremanera Leyes y Martinez.
En todo caso, con el triunfo a cuestas, es mucho mas facil corregir errores.
Quilmes sigue pensando en ser protagonista pero todavía no alcanza a definir un sistema de juego y una personalidad, como para ser optimistas. De todas maneras, cuando se suma de a tres, es mucho más placentero tratar de resolver los problemas. Y Caruso lo sabe.
Habrá que ver que alineación arma para ir a Arroyito, sobre todo porque algunos jugadores terminaron golpeados, entre ellos Caneo y Leyes.
El Nacional B sigue mostrando ser un torneo duro, difícil, épico, y muchos quieren lo mismo, es decir, el ascenso, aunque sólo dos lo consiguen en una primera instancia, y otros dos podrán lograrlo si alcanzan la promoción y la ganan.
Con esta victoria, el Cervecero suma 15 puntos en la tabla, y mira expectante el futuro.
El próximo lunes a las 21 visita a Rosario Central en el siempre difícil reducto de Arroyito, con el arbitraje de Néstor Pitana.
Quilmes tuvo un aceptable primer tiempo, donde justificó la victoria parcial con el gol de Garnier, después de una corajeada del jujeño.
En el complemento, Quilmes tuvo más problemas para contener a los tucumanos, que generaron cuatro situaciones claras, y ahí se destacó el arquero Trípodi, quien está volviendo a ser el de otrora.
Cuando las cosas parecian complicarse, llegó un gran centro de Caneo y Cauteruccio de cabeza puso el 2 a 0, y tranquilizó las aguas.
Quedó como saldo la importancia de la victoria, aunque algunas dudas que tendrá que despejar el técnico, teniendo en cuenta lo que se viene.
Fue una noche atípica, con un partido que terminó sobre la medianoche, estableciendo un auténtico record, con las exigencias de la televisión y el fútbol para todos.
El Cervecero tendrá que rearmar el medio campo, para buscar mayor ensamble, y atrás debera superar fallas, que hoy mostraron sobremanera Leyes y Martinez.
En todo caso, con el triunfo a cuestas, es mucho mas facil corregir errores.
Quilmes sigue pensando en ser protagonista pero todavía no alcanza a definir un sistema de juego y una personalidad, como para ser optimistas. De todas maneras, cuando se suma de a tres, es mucho más placentero tratar de resolver los problemas. Y Caruso lo sabe.
Habrá que ver que alineación arma para ir a Arroyito, sobre todo porque algunos jugadores terminaron golpeados, entre ellos Caneo y Leyes.
El Nacional B sigue mostrando ser un torneo duro, difícil, épico, y muchos quieren lo mismo, es decir, el ascenso, aunque sólo dos lo consiguen en una primera instancia, y otros dos podrán lograrlo si alcanzan la promoción y la ganan.
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