QUILMES... Y LA GENTE

Sin duda, el simpatizante Cervecero, acostumbrado al sufrimiento -no hay que olvidar que en este torneo Apertura Quilmes sólo ganó cuatro veces, de las cuales una fue con Godoy Cruz, en Banfield y sin público, otra fue en Bahía Blanca, con cerca de 400 hinchas, en un lunes por la noche, en día laborable, y las restantes fueron de local con All Boys y San Lorenzo, que fueron las dos fechas donde el hincha pudo disfrutar al final con una buena concurrencia- estará hoy pensando que el 2011 puede ser el gran año de la recuperación.
Para ello Quilmes tendrá que hacer una campaña que orille los 30 puntos (sobre 57 posibles), es decir, una perfomance para estar en el lote de arriba. Eso significará encarar el año con espíritu ofensivo, para ganar no sólo en casa sino afuera.
Curiosas cuestiones del torneo, en este Apertura Quilmes sólo logró el promedio de UNO en la primera fecha -empate con Colón- y en la última -la victoria de visitante en Olimpo por 1 a 0.
Entre una y otra fecha el promedio fue siempre inferior a UNO, llegando incluso a ser inferior a la mitad.
El impulso que ha dado el hecho de sumar 13 puntos sobre 18 posibles debe ser el gran aliciente para el 2011, donde de entrada el Cervecero tendrá que visitar a Colón en Santa Fe, para recibir luego al campeón Estudiantes en el Centenario y visitar en la tercera fecha al siempre difícil Lanús.
En la campaña del año próximo será fundamental el apoyo de la gente, que así como llevó 400 hinchas a Bahía Blanca podrá multiplicar esa cifra en buen número en cuanto escenario tenga que presentarse el Decano (salvo la visita a Mendoza, sobre el final del torneo Clausura, el resto de los partidos de visitante no serán lejos). Será el Clausura la oportunidad propicia para demostrar que ese "león dormido" que fue Quilmes en buen tramo del Apertura -estuvo 13 fechas sin ganar- y que terminó despertándose algo, está en condiciones de ser protagonista, la única manera para pensar en la permanencia.
Leonardo Madelón tendrá que inculcar a sus dirigidos que se puede alcanzar la meta, y para ello será necesario que el grupo esté unido, para contagiar a la gente, que siempre está dispuesta a acompañar.
Hay esperanza en los días que vienen. Lo importante: no subirse al carro triunfal, mantener la humildad y demostrar que se puede...

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