La Argentina cruzó con buen pie el primer peldaño de la escalera que lleva al título mundial en Sudáfrica.
Ganó 1 a 0 con el tempranero gol de Heinze, pudo haber goleado pero desperdició demasiadas ocasiones, que al final pudo lamentar si Nigeria, en una de esas incursiones sin muchas ideas, "pescaba" el empate.
No fue así y el resultado inclinó la balanza para la justicia. Ganó el mejor y ese fue el seleccionado que dirige Diego Maradona.
Por supuesto, el seleccionado nacional tendrá que ir mejorando si quiere ir escalando hacia arriba.
Porque en esta primera presentación, con todos los temores que siempre genera la primera vez, cometió algunos errores y dejó al descubierto que una cosa es cuando ataca y otra, cuando defiende.
Maradona tendrá que corregir los desacoples, sobre todo por el lado de Jonás Gutiérrez, el único amonestado, que jugó por la derecha pero que demostró que no tiene alma de marcador. Una cosa es cuando se manda al ataque y otra cuando debe volver o tiene que marcar.
De todas maneras esta presentación no tuvo demasiados sobresaltos, salvo la incertidumbre del final, porque, se sabe, el 1 a 0 no garantiza nada, y cuando los partidos no se cierran, se pueden sufrir.
El próximo jueves el rival será Corea del Sur, que derrotó a Grecia con claridad por 2 a 0 y que se anticipa como el adversario más complicado del grupo, ya que los helenos no demostraron mucha solidez, lo que por ahora los hace loas más débiles de la zona.
De todas maneras, nada está dicho aún. Grecia tendrá que jugarse sus últimas cartas con Nigeria, mientras que Argentina y Corea del Sur disputarán como ganadores el sueño del primer lugar, para enfrentar en la próxima instancia al segundo del grupo más parejo de todos, aquel en el que México, Sudáfrica, Uruguay y Francia igualan en un punto, aunque los dos primeros corren por el momento con la pequeña ventaja del gol anotado.
El Mundial recién empieza, en una tarde lluviosa en Buenos Aires, el país se paralizó para ver al seleccionado, que por ahora no deslumbró pero convenció, porque demostró que con Messi enchufado las posibilidades de ataque son enormes. En todo caso, habrá que afinar la puntería para no perdonar tanto y a la postrer sufrir al final sin necesidad.
El jueves próximo, a las 8.30, nueva presentación argentina y otra vez todo el mundo poniendo los ojos en los televisores, escuchando la radio o como sea. Será en día laborable y habrá que ver qué pasa en oficinas, colegios, lugares públicos, etcétera. Vamos vamos Argentina... Hasta el próximo partido.
Ganó 1 a 0 con el tempranero gol de Heinze, pudo haber goleado pero desperdició demasiadas ocasiones, que al final pudo lamentar si Nigeria, en una de esas incursiones sin muchas ideas, "pescaba" el empate.
No fue así y el resultado inclinó la balanza para la justicia. Ganó el mejor y ese fue el seleccionado que dirige Diego Maradona.
Por supuesto, el seleccionado nacional tendrá que ir mejorando si quiere ir escalando hacia arriba.
Porque en esta primera presentación, con todos los temores que siempre genera la primera vez, cometió algunos errores y dejó al descubierto que una cosa es cuando ataca y otra, cuando defiende.
Maradona tendrá que corregir los desacoples, sobre todo por el lado de Jonás Gutiérrez, el único amonestado, que jugó por la derecha pero que demostró que no tiene alma de marcador. Una cosa es cuando se manda al ataque y otra cuando debe volver o tiene que marcar.
De todas maneras esta presentación no tuvo demasiados sobresaltos, salvo la incertidumbre del final, porque, se sabe, el 1 a 0 no garantiza nada, y cuando los partidos no se cierran, se pueden sufrir.
El próximo jueves el rival será Corea del Sur, que derrotó a Grecia con claridad por 2 a 0 y que se anticipa como el adversario más complicado del grupo, ya que los helenos no demostraron mucha solidez, lo que por ahora los hace loas más débiles de la zona.
De todas maneras, nada está dicho aún. Grecia tendrá que jugarse sus últimas cartas con Nigeria, mientras que Argentina y Corea del Sur disputarán como ganadores el sueño del primer lugar, para enfrentar en la próxima instancia al segundo del grupo más parejo de todos, aquel en el que México, Sudáfrica, Uruguay y Francia igualan en un punto, aunque los dos primeros corren por el momento con la pequeña ventaja del gol anotado.
El Mundial recién empieza, en una tarde lluviosa en Buenos Aires, el país se paralizó para ver al seleccionado, que por ahora no deslumbró pero convenció, porque demostró que con Messi enchufado las posibilidades de ataque son enormes. En todo caso, habrá que afinar la puntería para no perdonar tanto y a la postrer sufrir al final sin necesidad.
El jueves próximo, a las 8.30, nueva presentación argentina y otra vez todo el mundo poniendo los ojos en los televisores, escuchando la radio o como sea. Será en día laborable y habrá que ver qué pasa en oficinas, colegios, lugares públicos, etcétera. Vamos vamos Argentina... Hasta el próximo partido.
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