"Los mates, recipientes para una tradición", es la muestra que se presenta en el Museo de la Ciudad, Defensa 219, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Puede visitarse de lunes a domingos y feriados de 11 a 19, con entrada de un peso, lunes y miércoles gratis.
La yerba mate no es una hierba sino un frondoso árbol, la usaban los habitantes de estas tierras antes de que llegaron los españoles. Científicamente el nombre es Ilex Paraguayensis y crece en el sector subtropical de Sudamérica correspondiente a los territorios de la Argentina, Paraguay, Uruguay y sur del Brasil.
El consumo de este producto se extendió en estos países que adoptaron esta bebida no sólo por sus cualidades nutritivas sino también por su sabor especial, que resulta extraño a quienes lo prueban por primera vez, pero que la costumbre transforma en algo sabroso y agradable.
El mate tiene en cada región ciertas particularidades que lo diferencias: el agregado de otras hierbas aromáticas como el cedrón, cáscaras disecadas de naranja y de forma más generalizada, azúcar. Se toma como desayuno o merienda pero cualquier causa que lo justifique es buena para acebar unos mates que acompañan en la soledad o son motivo de reunión en familia o con amigos.
En esta muestra pueden verse distintos mates de porcelana que se usaron en la época del Centenario y otros de años anteriores y posteriores que muestran la importancia de esta costumbre tan argentina en la vida de todos.
Las colecciones de la muestra son de la señora Guiomar de Urgel, el señor Pedro Naón Argerich y la del señor Amaro Villanueva, historiador e investigador del mate. Esta última colección pertenece desde hace años al Museo de la Ciudad, por la donación de la familia Gerchunof.
Puede visitarse de lunes a domingos y feriados de 11 a 19, con entrada de un peso, lunes y miércoles gratis.
La yerba mate no es una hierba sino un frondoso árbol, la usaban los habitantes de estas tierras antes de que llegaron los españoles. Científicamente el nombre es Ilex Paraguayensis y crece en el sector subtropical de Sudamérica correspondiente a los territorios de la Argentina, Paraguay, Uruguay y sur del Brasil.
El consumo de este producto se extendió en estos países que adoptaron esta bebida no sólo por sus cualidades nutritivas sino también por su sabor especial, que resulta extraño a quienes lo prueban por primera vez, pero que la costumbre transforma en algo sabroso y agradable.
El mate tiene en cada región ciertas particularidades que lo diferencias: el agregado de otras hierbas aromáticas como el cedrón, cáscaras disecadas de naranja y de forma más generalizada, azúcar. Se toma como desayuno o merienda pero cualquier causa que lo justifique es buena para acebar unos mates que acompañan en la soledad o son motivo de reunión en familia o con amigos.
En esta muestra pueden verse distintos mates de porcelana que se usaron en la época del Centenario y otros de años anteriores y posteriores que muestran la importancia de esta costumbre tan argentina en la vida de todos.
Las colecciones de la muestra son de la señora Guiomar de Urgel, el señor Pedro Naón Argerich y la del señor Amaro Villanueva, historiador e investigador del mate. Esta última colección pertenece desde hace años al Museo de la Ciudad, por la donación de la familia Gerchunof.
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