Quilmes derrotó a Sportivo Italiano por 2 a 0, con goles de Sava y Caneo, y quedó momentáneamente segundo en la tabla de posiciones de la primera B Nacional, o sea que está, al menos hasta el lunes en que juega San Martín de San Juan con Olimpo, en zona de ascenso directo.
Instituto, que perdió en Mar del Plata 2 a 0 con Aldosivi, sigue primero con 51 puntos, luego aparece Quilmes con 49, San Martín de San Juan tiene 48 y Olimpo 45.
Quilmes fue ampliamente superior al modesto Italiano, cuyo destino de descenso viene marcado desde hace varias fechas.
Al minuto ganaba el Cervecero con el gol de Sava -en el complemento Caneo se encargó de cerrar las cifras- y puede decirse que la victoria del Decano nunca sufrió sobresaltos, aunque pudo ser más amplia por la cantidad de oportunidades que fueron malogradas en la segunda etapa.
El técnico Jorge Ghiso finalmente se decidió por el pibe Narvay -dejó a Carrasco en el banco, ingresó en el segundo tiempo- en ataque para acompañar a Sava -Narvay rindió y se retiró aplaudido cuando fue cambiado-, y en defensa el pibe Agorreca y Emanuel Martínez ingresaron por los suspendidos Rodríguez y Quiles.
Fue un monólogo Cervecero, que volvió a malograr situaciones como para terminar redondeando una goleada histórica.
De todas maneras, siempre hay que señalar la modestia del rival, que es el peor equipo del campeonato y que camina rumbo a un destino llamado descenso.
Este partido ha sido el gran aperitivo, de cara al encuentro del próximo jueves, cuando Quilmes visite a Instituto de Córdoba, en el gran choque de la próxima fecha, entre el hoy líder y su escolta (vale repetir que el lunes San Martín de San Juan recibe a Olimpo y si ganan los sanjuaninos llegarán a la punta con Instituto).
Así las cosas se vienen los partidos decisivos para saber para qué está Quilmes en este torneo, donde el sueño del ascenso directo aparece posible, por supuesto, convirtiéndose el encuentro en Córdoba en la gran oportunidad para subirse al tren de la victoria que lleve a la punta.
Faltan diez fechas, es decir treinta puntos, y el equipo de Ghiso está "ahí", buscando dar el gran salto de calidad. Para la próxima fecha el técnico podrá contar nuevamente con Quiles y Rodríguez, y habrá que ver qué pasa con Lentini, quien podría estar en condiciones.
Serán pocos días de preparación para el gran encuentro del jueves, y el técnico deberá decidir el esquema para jugarse un partido parecido al que disputó días pasados en San Juan, porque se trata de visitar al líder en su casa y procurar quitarle los tres puntos para encarar el resto con el mejor rostro.
Una victoria en Córdoba dará aire y esperanza para los días que vienen, como para imaginar un sábado de gloria, vísperas de Pascuas, con un estadio Centenario colmado para disputar el gran clásico (mal que le pese a algunos) con el siempre difícil Defensa y Justicia, de Florencio Varela. Lógicamente, como suele decirse habrá que ir paso a paso, ahora más que nunca con la cabeza puesta en dar el mejor examen en Instituto... ¿Defensa? Por ahora, está fuera del pensamiento porque, vale repetirlo, el jueves se juega muchísimo el Decano, aunque la gente hoy se animó a cantar el "vamos a volver/ vamos a volver..." un grito optimista que vale la pena subrayar en esto de alimentar un sueño de Primera.
Instituto, que perdió en Mar del Plata 2 a 0 con Aldosivi, sigue primero con 51 puntos, luego aparece Quilmes con 49, San Martín de San Juan tiene 48 y Olimpo 45.
Quilmes fue ampliamente superior al modesto Italiano, cuyo destino de descenso viene marcado desde hace varias fechas.
Al minuto ganaba el Cervecero con el gol de Sava -en el complemento Caneo se encargó de cerrar las cifras- y puede decirse que la victoria del Decano nunca sufrió sobresaltos, aunque pudo ser más amplia por la cantidad de oportunidades que fueron malogradas en la segunda etapa.
El técnico Jorge Ghiso finalmente se decidió por el pibe Narvay -dejó a Carrasco en el banco, ingresó en el segundo tiempo- en ataque para acompañar a Sava -Narvay rindió y se retiró aplaudido cuando fue cambiado-, y en defensa el pibe Agorreca y Emanuel Martínez ingresaron por los suspendidos Rodríguez y Quiles.
Fue un monólogo Cervecero, que volvió a malograr situaciones como para terminar redondeando una goleada histórica.
De todas maneras, siempre hay que señalar la modestia del rival, que es el peor equipo del campeonato y que camina rumbo a un destino llamado descenso.
Este partido ha sido el gran aperitivo, de cara al encuentro del próximo jueves, cuando Quilmes visite a Instituto de Córdoba, en el gran choque de la próxima fecha, entre el hoy líder y su escolta (vale repetir que el lunes San Martín de San Juan recibe a Olimpo y si ganan los sanjuaninos llegarán a la punta con Instituto).
Así las cosas se vienen los partidos decisivos para saber para qué está Quilmes en este torneo, donde el sueño del ascenso directo aparece posible, por supuesto, convirtiéndose el encuentro en Córdoba en la gran oportunidad para subirse al tren de la victoria que lleve a la punta.
Faltan diez fechas, es decir treinta puntos, y el equipo de Ghiso está "ahí", buscando dar el gran salto de calidad. Para la próxima fecha el técnico podrá contar nuevamente con Quiles y Rodríguez, y habrá que ver qué pasa con Lentini, quien podría estar en condiciones.
Serán pocos días de preparación para el gran encuentro del jueves, y el técnico deberá decidir el esquema para jugarse un partido parecido al que disputó días pasados en San Juan, porque se trata de visitar al líder en su casa y procurar quitarle los tres puntos para encarar el resto con el mejor rostro.
Una victoria en Córdoba dará aire y esperanza para los días que vienen, como para imaginar un sábado de gloria, vísperas de Pascuas, con un estadio Centenario colmado para disputar el gran clásico (mal que le pese a algunos) con el siempre difícil Defensa y Justicia, de Florencio Varela. Lógicamente, como suele decirse habrá que ir paso a paso, ahora más que nunca con la cabeza puesta en dar el mejor examen en Instituto... ¿Defensa? Por ahora, está fuera del pensamiento porque, vale repetirlo, el jueves se juega muchísimo el Decano, aunque la gente hoy se animó a cantar el "vamos a volver/ vamos a volver..." un grito optimista que vale la pena subrayar en esto de alimentar un sueño de Primera.
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