QAC: UNA GRAN APUESTA

Mañana empieza la segunda rueda para Quilmes, en su afán de siempre de jugar en primera división.
De entrada nomás la cosa no es nada fácil: visita a Boca Unidos, en Corrientes, donde deberá luchar contra el calor (se habla de sensación térmica altísima a la hora del partido, 17.15), contra el hecho de ser "visitante", con todo lo que ello significa históricamente para el Decano del fútbol argentino -dirige el árbitro Baliño- y en este caso con una imagen prácticamente nueva y arriesgada, porque lleva cinco cambios en relación al equipo que terminó el torneo el año pasado con el técnico José María Bianco.
Los 31 puntos alcanzados, a 3 del segundo Unión (ahora a 6 porque el Tatengue ganó el jueves ante Gimnasia de Jujuy) no dejaron satisfechos a los dirigentes, que entendieron que la caida 4 a 1 en Córdoba con Belgrano fue un golpe demasiado fuerte, capaz de voltera a un técnico.
Así las cosas llegó Jorge Ghiso, el ex Ferro, y se trajeron cinco refuerzos: Pablo Garnier y Miguel Caneo, que volvieron al club, el uruguayo Rodríguez, el lateral Martínez, el joven Sebastián Battaglia, todos serán titulares mañana.
El equipo de Ghiso en principio sería éste: Trípodi, Martínez, Ribonetto, Rodríguez, Corvalán, Garnier, Kalinski, Battaglia, Caneo, Carrasco y Sava.
No debe olvidarse que esta segunda parte se caracteriza por el tiempo: a raíz del mundial de junio en Sudáfrica, el torneo debe concluir el 15 de mayo, jugándose partidos entresemana.
Quilmes tiene 4 encuentros de visitante entre los primeros seis, con visitas realmente preocupantes: además de viajar a Corrientes, tendrá que visitar a Aldosivi en Mar del Plata, a Gimnasia de Jujuy y al líder San Martín de San Juan. De local recibirá al riesgoso Deportivo Merlo y a Atlético Rafaela (el primero que le quitó el invicto).
Quiere decir que la apuesta dirigencial es prácticamente audaz, porque desde ya se entiende que el objetivo -léase ascenso- debe pasar por lograr más puntos que en la era Bianco (de 32 para arriba) y en este primer tramo de 18 puntos, por lo menos habrá que cosechar 12 ó 10 como mínimo para no entrar en la angustia y la desesperación, tan habitual en la historia de los últimos treinta años en el Decano cada vez que las apuestas son fuertes y los resultados no acompañan.
De todas maneras, hay que dar la diestra a la apuesta dirigencial y los sueños del técnico, que en principio parece dispuesto a jugarse de entrada nomás (en todo caso no le queda otra).
Quilmes tendrá mañana en Corrientes una contienda más que difícil. Más allá del calor, que es igual para los dos, habrá que ver si los refuerzos -los ejemplos Garnier y Caneo son más que elocuentes de lo que se ha invertido para alcanzar el logro mayor- responden rápidamente a las expectativas.
Ojalá prevalezca el sentido común, entendiendo que es una carrera de 57 puntos, donde por lo menos habrá que cosechar un 60 por ciento para tener aspiraciones, para estar entre los primeros cuatro (los dos primeros ascienden, los otros juegan la promoción).
Otra ilusión está en marcha. Los quilmeños podrán seguir las alternativas de este primer examen en las habituales trasmisiones de FM SUR (88.9) con 22 años detrás del Cervecero en todas partes, con los relatos del turco Luciano Yaman y los comentarios de Carlos Doallo y equipo, y la flamante FM Q (90.5) con los relatos de Adrián Di Blasi y los comentarios de Rubén Durán y equipo.

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