Los malos resultados, la deriva que muestra "el barco quilmeño" determinaron que rápidamente los directivos del Quilmes AC se pusieran en campaña y cerraran filas para incorporar a José María "el Chaucha" Bianco para la dirección técnica.
Bianco vuelve al club en el que tuvo una labor aceptable, más allá de no haber logrado el objetivo final. Hoy le toca tomar el timón de un equipo que está prácticamente sin chances para lograr el ascenso directo o por la Promoción.
Entonces, llega con la misión de enderezar el rumbo, tratar de sumar puntos y sentar una base para el futuro.
Recordemos que Quilmes cayó 4 a 2 con Instituto en el Centenario y fue a Lomas de Zamora, ya sin el técnico Alberto Pascutti y con la dupla interina Kergaravat-Escalante, para dejar una pobrísima imagen ante un rival que lucha por quedarse en la categoría.
Así las cosas, rápidamente se buscó nuevo técnico, que recién podrá sentir responsabilidades cuando el Cervecero visite al líder y casi seguro ascendido, Chacarita, en cancha de Ferro el sábado 2 de mayo.
Entretanto habrá un partido el sábado con el Independiente Rivadavia de Mendoza, el equipo del Burro Ortega, que le servirá al técnico Bianco para hacer evaluaciones y comenzar a diagramar el futuro.
Comienza una nueva etapa, con todo el cimbronazo que eso significa. Bianco tiene la difícil tarea de recuperar a la gente, que hoy por hoy le dice no al equipo y que seguramente el sábado irá en escaso número al Estadio Centenario, justamente el día del cumpleaños del Estadio.
Es una nueva etapa la que empieza, con ilusiones y expectativas, con decepciones y frustraciones por doquier, eso sí, con una cuota de esperanza. Ya no está Pascutti, tampoco Adrián Di Blasi -el mítico relator de FM SUR, que después de casi dos décadas le dijo adiós a la radio para pasar a otra, la Q, y que sin duda será extrañado enormemente, más allá de los esfuerzos de Luciano Yaman para reemplazarlo- y ahora como siempre se enciende la ilusión. No hay que olvidar el objetivo del ascenso, pero para lograrlo debe tenerse en claro que las cosas deben hacerse con proyectos y no con impulsos. Ojalá la "era Chaucha" comience a trazar las líneas de un mediano plazo exitoso.
Bianco vuelve al club en el que tuvo una labor aceptable, más allá de no haber logrado el objetivo final. Hoy le toca tomar el timón de un equipo que está prácticamente sin chances para lograr el ascenso directo o por la Promoción.
Entonces, llega con la misión de enderezar el rumbo, tratar de sumar puntos y sentar una base para el futuro.
Recordemos que Quilmes cayó 4 a 2 con Instituto en el Centenario y fue a Lomas de Zamora, ya sin el técnico Alberto Pascutti y con la dupla interina Kergaravat-Escalante, para dejar una pobrísima imagen ante un rival que lucha por quedarse en la categoría.
Así las cosas, rápidamente se buscó nuevo técnico, que recién podrá sentir responsabilidades cuando el Cervecero visite al líder y casi seguro ascendido, Chacarita, en cancha de Ferro el sábado 2 de mayo.
Entretanto habrá un partido el sábado con el Independiente Rivadavia de Mendoza, el equipo del Burro Ortega, que le servirá al técnico Bianco para hacer evaluaciones y comenzar a diagramar el futuro.
Comienza una nueva etapa, con todo el cimbronazo que eso significa. Bianco tiene la difícil tarea de recuperar a la gente, que hoy por hoy le dice no al equipo y que seguramente el sábado irá en escaso número al Estadio Centenario, justamente el día del cumpleaños del Estadio.
Es una nueva etapa la que empieza, con ilusiones y expectativas, con decepciones y frustraciones por doquier, eso sí, con una cuota de esperanza. Ya no está Pascutti, tampoco Adrián Di Blasi -el mítico relator de FM SUR, que después de casi dos décadas le dijo adiós a la radio para pasar a otra, la Q, y que sin duda será extrañado enormemente, más allá de los esfuerzos de Luciano Yaman para reemplazarlo- y ahora como siempre se enciende la ilusión. No hay que olvidar el objetivo del ascenso, pero para lograrlo debe tenerse en claro que las cosas deben hacerse con proyectos y no con impulsos. Ojalá la "era Chaucha" comience a trazar las líneas de un mediano plazo exitoso.
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