El poeta Froilàn Francisco Gorrindo cumpliría mañana cien años. Se trata de un ícono del tango con Quilmes como plataforma de proyección al país y al mundo.
Según cuenta el autor Jorge Fernández, Gorrindo tuvo una vida aciaga y sus letras testimonian los sinsabores y las amarguras que le deparó la vida.
Porque perdió a su padre cuando era muy chico y fue criado por su madre y sus tías.
Nació y murió en Quilmes a lso 54 años, el 2 de enero de 1963.
Se casó con Elma Lapenti en 1937 y tuvieron tres hijos, Sonia Norma, Marta Edith y Juan Carlos.
Precisamente entre los años 30 y 40 escribió las mejores letras de tango, que quedaron para la inmortalidad, como "Las cuarenta", "Paciencia", "Mala suerte", "Gólgota"...
En "Mala suerte" define los sueños de libertad, cuando dice que es como el jilguero, que aunque viva en jaula de oro en su canto llora el antojo de volar.
Pero fue "Las cuarenta" el tango más destacado, cuya letra sintetiza un sentimiento, una amargura por los sinsabores de la vida. Vale le pena este homenaje al gran maestro, reproduciendo las estrofas del tema escrito en 1937.
"Con el pucho de la vida apretado entre los labios/ la mirada turbia y fría, un poco lerdo el andar/ dobló la esquina del barrio y, curda ya de recuerdos/ como volcando un veneno esto se le oyó acusar.
"Vieja calle de mi barrio donde he dado el primer paso/ vuelvo a vos, gastado el mazo en ínútil barajar/ con una llaga en el pecho, con mi sueño hecho pedazos/ que se rompió en un abrazo que me diera la verdad.
"Aprendí todo lo malo, aprendì todo lo bueno/ sé del beso que se compra, sé del beso que se da/ del amigo que es amigo siempre y cuando le convenga/ y sé que con mucha plata uno vale mucho más.
"Aprendí que en esta vida hay que llorar si otros lloran/ y si la murga se ríe, hay que saberse reír/ no pensar ni equivocado... Para qué, si igual se vive/ y además corrés el riesgo de que te bauticen gil.
"La vez que quise ser bueno en la cara se me rieron/ cuando grité una injusticia la fuerza me hizo callar/ la experiencia fue mi amante, el desengaño, mi amigo/ oda carta tiene cotnra y toda contra se da.
"Hoy no creo ni en mí mismo... Todo es grpo, todo es falso/ y aquel, el que está más alto es igual a los demás/ Por eso, no has de extrañarte si alguna noche, borraco/ me vieras pasar del brazo con quien no debo pasar.
Según cuenta el autor Jorge Fernández, Gorrindo tuvo una vida aciaga y sus letras testimonian los sinsabores y las amarguras que le deparó la vida.
Porque perdió a su padre cuando era muy chico y fue criado por su madre y sus tías.
Nació y murió en Quilmes a lso 54 años, el 2 de enero de 1963.
Se casó con Elma Lapenti en 1937 y tuvieron tres hijos, Sonia Norma, Marta Edith y Juan Carlos.
Precisamente entre los años 30 y 40 escribió las mejores letras de tango, que quedaron para la inmortalidad, como "Las cuarenta", "Paciencia", "Mala suerte", "Gólgota"...
En "Mala suerte" define los sueños de libertad, cuando dice que es como el jilguero, que aunque viva en jaula de oro en su canto llora el antojo de volar.
Pero fue "Las cuarenta" el tango más destacado, cuya letra sintetiza un sentimiento, una amargura por los sinsabores de la vida. Vale le pena este homenaje al gran maestro, reproduciendo las estrofas del tema escrito en 1937.
"Con el pucho de la vida apretado entre los labios/ la mirada turbia y fría, un poco lerdo el andar/ dobló la esquina del barrio y, curda ya de recuerdos/ como volcando un veneno esto se le oyó acusar.
"Vieja calle de mi barrio donde he dado el primer paso/ vuelvo a vos, gastado el mazo en ínútil barajar/ con una llaga en el pecho, con mi sueño hecho pedazos/ que se rompió en un abrazo que me diera la verdad.
"Aprendí todo lo malo, aprendì todo lo bueno/ sé del beso que se compra, sé del beso que se da/ del amigo que es amigo siempre y cuando le convenga/ y sé que con mucha plata uno vale mucho más.
"Aprendí que en esta vida hay que llorar si otros lloran/ y si la murga se ríe, hay que saberse reír/ no pensar ni equivocado... Para qué, si igual se vive/ y además corrés el riesgo de que te bauticen gil.
"La vez que quise ser bueno en la cara se me rieron/ cuando grité una injusticia la fuerza me hizo callar/ la experiencia fue mi amante, el desengaño, mi amigo/ oda carta tiene cotnra y toda contra se da.
"Hoy no creo ni en mí mismo... Todo es grpo, todo es falso/ y aquel, el que está más alto es igual a los demás/ Por eso, no has de extrañarte si alguna noche, borraco/ me vieras pasar del brazo con quien no debo pasar.
Comentarios
los felicito, este blog realmente tiene el sabor de los cultivos
y nos encierra aún en utopía de comunidad compartida...
leyendo este texto sobre Gorrindo que mi viejo nombraba...
se me cruzó la imágen de un poeta ordenado y con portafolio que hoy vi en la plaza producida y venida a pasto seco entre la fuente que mantiene vida..y que no es la plazita donde todos jugamos alguna vez...
(hablo de conesa-colón-lavalle moreno)
decía vi a este digno señor ofreciendo sus poemas por monedas a
a los visitantes soleandose en los bancos...sería bueno contarlo en este blog..por personaje de quilmes y por persistencia de desear mostrar sus letras...
me gustaría recibirlos por mis blogs,también muestro de un modo parecido de palabras cosas que se siente en "ríos de la surera" ,"orillas de la cuentera" o "aires d areki navha"
un saludo
mabel